La continuidad de Solari caduca el lunes

Alejandro Alcázar

Santiago Solari fue nombrado entrenador del primer equipo del Real Madrid de forma provisional el 29 de octubre. Sustituyó a Julen Lopetegui, destituido por los malos resultados, de manera interina y por 15 días como establece la normativa. Si el club decide que siga al frente del equipo, está obligado a hacerle ficha y contrato de la primera plantilla el próximo lunes, día que concluye el plazo marcado por la reglamentación federativa.

Su trabajo es valorado positivamente por los máximos responsables del club, cuya intención en estos momentos es dar continuidad al trabajo iniciado por Solari. Dos motivos avalan esa decisión. Por un lado, su continuidad concedería tiempo para encontrar un entrenador de primera línea para la próxima temporada y, por otro, su labor está siendo aire fresco para un equipo al que cogió en crisis.

IMPULSO POSITIVO

Su llegada ha cambiado la dinámica negativa en la que estaba inmerso el Real Madrid. Ha dado un empujón anímico a la plantilla tomando decisiones que han tenido un efecto positivo. Ha cambiado la mentalidad, el sistema, el juego, ha tirado de las rotaciones y ha obtenido un balance positivo en los tres partidos que ha dirigido. Tres triunfos, uno en cada competición (Copa, Liga y Champions), con once goles a favor y ninguno en contra.

Ha recuperado el estilo de juego ofensivo con un fútbol más vertical y de menos toque que intentó implantar su antecesor. Menos encorsamiento táctico en ataque y con más libertad de movimientos flexibilizando los sistemas. Ha rotado la plantilla utilizando 21 jugadores en tres partidos, uno menos que Lopetegui en 14. Ha apostado por los jóvenes como Odriozola, Reguilón, Vinicius o Javi Sánchez que han dado otro aire al equipo. Y, ha sentado a jugadores importantes que no están en su mejor momento como Modric, Isco o Asensio. Decisiones puntuales que han servido para salir del bache en el que estaba el equipo.