¡Lo de Casemiro es escandaloso!

Carlos Casemiro es el futbolista más indultado del panorama futbolístico mundial. Existe un reglamento para él y otro para todos los demás. Lo que para cualquier jugador sería una amarilla, para él es un guiño cómplice arbitral. Lo que para cualquier jugador sería una doble amonestación, para él es un "jueguen, juguen". En la primera mitad ante el Manchester City debió ver la roja, pero ahí siguió, sin inmutarse, sabiéndose intocable.

La primera acción fue de libro. Una entrada por detrás, con las dos piernas y sin tocar balón sobre De Bruyne, que fue al suelo. Orsato señaló la falta, pero se guardó las cartulinas en el bolsillo, como si no hubiera pasado nada. Era una amarilla escandalosa que Casemiro no vio.

La segunda acción fue con Foden, al que agarró descaradamente para que no se marchara con el balón controlado y lo echó al suelo. El brasileño se hizo el muerto simulando que se había hecho daño para que el árbitro se olvidara de la amarilla. Funcionó, como siempre. Orsato volvió a indultar la que habría sido la segunda amarilla y la roja. Las tarjetas son los Reyes cuando Casemiro entra en acción.