Benzema lidera la sequía del ataque madridista

Benzema marcó un doblete y superó a Di Stefano

 El francés vio puerta por partida doble ante el Galatasaray / MEDIAPRO

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

La defensa es el mejor ataque. Zidane se ha refugiado en un equipo solidario para contrarrestar la sequía goleadora de un equipo que había adoptado a Benzema como su máximo referente. Pero el francés ha entrado en crisis y ya no disimula esa falta de pegada de los delanteros blancos. Karim acumula 43 días sin marcar, 455 minutos seco, no lo hace desde el pasado 15 de diciembre en Mestalla, cuando marcó el gol del empate en el minuto 93 de partido.

El Real Madrid ha jugado desde entonces siete partidos, en los que ha marcado 12 goles pero solo un delantero figura en esa lista, Bale, que marcó un gol al Unionista en Copa, un rival de Segunda B. Los otros once goleadores son defensas y centrocampistas, que han tenido que salir al rescate por la falta de contundencia de sus compañeros de ataque. No es de extrañar que 18 jugadores de los 22 de campo que tiene Zidane hayan marcado esta temporada.

DATOS PREOCUPANTES DE LOS DELANTEROS

Los datos desvelan que el 47,4% de los goles son obra de los delanteros, ocho jugadores para 30 de los 59 goles marcados en todas las competiciones. Lo alarmante es que el 53% de esos goles son obra de Benzema, y si el francés falla el Madrid se queda huérfano del todo arriba. Solo Rodrygo cumple con seis dianas, pero el brasileño también lleva sin marcar desde el 11 de diciembre. Entre medios y defensas han convertido el 47,45% por ciento de los goles blancos este curso, 28 en total: 10 son de los zagueros (16,9%) y 18 de los centrocampistas (30,5%).

Un Madrid que, contrario a su tradición, se tiene que refugiar en su solidez defensiva para sacar adelante sus compromisos. Algo que de momento le sirve en las competiciones doméstica, líder en la Liga y campeón de la Supercopa de España, pero que puede pagar en Europa como se vio ante el PSG, rival con el que no pudo en ninguno de sus compromisos ante el poderío ofensivo del equipo francés.