REAL MADRID

Solo el Barça ha podido con el Madrid en enero

Los blancos han completado un mes de locos con 9 partidos en 26 días ganando ocho y perdiendo solo uno, la final de la Supercopa de España ante los azulgranas

La celebración blaugrana en el césped del King Abdullah Sport City

RFEF

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

Tras un primer tramo de temporada repleto de incertidumbre, el Real Madrid afrontaba el arranque de 2025 con un calendario de locos repleto de retos, en una temporada con siete competiciones diferentes. Liga, Supercopa de España, Copa del Rey y Champions esperaban a los blancos en este inicio de año con nueve partidos, cinco de ellos a domicilio, en 26 días. Un calendario sin apenas pausas para descansar con un choque cada tres días o menos.

No puede con los de Flick

Los de Ancelotti comenzaban el año en un mar de dudas. No acababan de encontrar un patrón de juego en los 26 partidos antes de las Navidades. Cinco derrotas y cuatro empates le mantenían vivo en todas las competiciones, pero su juego no convencía. En la Liga mandaba el At. Madrid ante el bajón de Barça, que venía arrasando, y situaba a los blancos segundos antes del parón estival. Y en la Champions estaba metido en un lío con tres derrotas en seis partidos.

Lo compensaba con los títulos de la Supercopa de Europa y el Mundialito de clubes, pero perdía la Supercopa de España ante el Barcelona por goleada (2-5), repitiendo la pobre impresión que ofreció en la Liga ante los de Flick (0-4). que cuestionaban el trabajo de Ancelotti. Pero los blancos supieron reaccionar con un mes en el que empezó a crecer, a encontrar el camino de su fútbol y acumular datos positivos.

Vivo en todas las competiciones

Ganó los otros ocho partidos asegurándose el pase a los cuartos de final de la Copa del Rey, el acceso a la siguiente fase de la Champions y situarse líder destacado en la Liga favorecido por la irregularidad del At. Madrid, al que le saca cuatro puntos, y el Barcelona, siete. Ancelotti ha convencido al equipo de sus posibilidades, encontrando soluciones en el banquillo para suplir las carencias habidas con la aparición de Ceballos, Asencio, Fran García, Brahim o el propio Rodrygo, además de la mejoría de Mbappé y el liderato de Bellingham.

Los beneficios han llegado por donde menos se esperaba el entrenador italiano, que siempre postula por defender como “llave del éxito”, pero ha sido la pegada la que ha sacado de la penuria a los blancos. Han marcado 30 goles en esas ocho victorias, con una media de 3,75 por partido cuando promediaba dos por encuentro. Y es que la mejor defensa es un buen ataque, mejorando también sus datos en goles encajados: cinco, que rebaja ese gol que recibía por partido a los 0,6. En definitiva, el Madrid despertó a tiempo menos ante el Barça, que se ha convertido en su bestia negra esta temporada.