A Ancelotti se le cae el equipo en la Champions

El Madrid no comparece en París, el PSG le somete y Mbappé se lo pasa en grande a costa de sus futuros compañeros

Al italiano le caduca el plan que había funcionado hasta ahora pese a poner el mejor once que él cree que tiene

PSG - Real Madrid | Courtois salvó al Madrid de recibir una goleada: todas sus paradas

Courtois salvó al Madrid de recibir una goleada en París: todas sus paradas / TELEFÓNICA

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

El Real Madrid no compareció en el Parque de los Príncipes sometido por el PSG, que facilitó a Mbappé que se lo pasara en grande para sentenciar el partido pese a la resistencia de un enorme Courtois. A Ancelotti le caduca el plan y se le cae el equipo. Su estilo es demasiado reconocible y Pochettino lo desactivó con un planteamiento táctico tan sencillo como práctico. Pese al revolcón el Madrid salió vivo, pero con pésimas sensaciones. Las piezas de su 4-3-3 empiezan a fallar del medio campo hacia adelante. Lo preocupante es que Carletto no reaccionó, se quedó paralizado y se conformó en defenderse a la italiana.

El planteamiento de Pochettino clavó a los madridistas en su campo con una presión precisa, intensa y esporádicamente agresiva. No necesitó mucho más. Le bastó ahogar a Kroos y a Modric para anular la salida del balón y borrar a los blancos del campo. Y lo hizo los noventa minutos para merendarse a un Madrid que confirma que ha llegado hasta aquí con muchas dudas en su fútbol. Lo peor, que sobre el papel Ancelotti puso el mejor once que cree que tiene, y se queda pequeño.

UN GOL EN CUATRO PARTIDO

Courtois, los centrales más Casemiro y el compromiso colectivo les libró de salir goleados. El dibujo del italiano se cae de las manos y fracasa en ataque. Han marcado un gol en los últimos cuatro partidos, bien es cierto que tres fueron sin Benzema al que Donnarumma vio de lejos como a sus dos acompañantes. Asensio, Benzema y Vinicius no tiraron ni una vez al portero italiano, perdieron todos los desafíos para convertirse en un ataque vulgar. Ancelotti dirá lo que quiera, pero algunos jugadores empiezan a pagar el exceso de kilómetros que  encoge la intensidad sin balón y limita la fluidez con él.

Parte de esa desaparición del ataque más prolífico de la Liga española es que Kroos y Modric pierden lucidez y precisión en la salida del juego cuando sienten el aliente de un marcador. Falta frescura general y la temporada se hace larga para los que acumulan demasiados minutos en sus piernas. Modric no encontró nunca a un Asensio que volvió a ser trasparente y Kroos vio a Vinicius de lejos y tampoco le encontró nunca en un mal día del brasileño. El detalle, que no completaron ni un contragolpe. Y un equipo que vive de él, se muere sin él.