Ancelotti deja al Real Madrid sin triplete

Su planteamiento no convence al madridismo cuando lo justifica diciendo que la derrota les “hace más fuerte”

La pobre imagen ante el Athletic, jugando a la defensiva con los de siempre y sin intensidad, le pone en el disparadero

Ancelotti: "Bale y Hazard están al nivel de Ceballos y Vallejo"

Ancelotti da su punto de vista tras caer eliminado en cuartos de final de Copa del Rey / Perform

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

“La derrota nos hace más fuerte”. ¡Ja! Así justificó Carlo Ancelotti tirar el triplete por el barranco. Los focos se posan sobre el italiano que no acertó en el planteamiento, el mismo que le funcionó en otras tardes con mucha defensa pero con gol. Prescindió de jugar con un delantero centro y decidió poner a Vinicius que estaba tieso por el desfase horario y el exceso de kilómetros.

Da la sensación de que el italiano preparó el partido más pendiente del estado de sus sudamericanos y de la salud de Benzema que de diseñar un buen plan con los jugadores que ha tenido dos semanas en Madrid para hacer frente a un partido que sabía iba a ser bravo. Los hechos demuestra que él fue el que más falló.

No fueron los brasileños o Valverde los que más padecieron el ‘jet-lag’, fue el propio Ancelotti anclado en una propuesta que los rivales conocen de memoria: defensa, defensa y contraataque, pero se olvidó de inculcar intensidad al juego para arrugarse ante un rival que salió a por el triunfo y lo consiguió. Y fue de justicia. El Madrid fracasó con el balón sometido por un Athletic presionante que ahogó a esa medular mítica que se quedó en vulgar. Ancelotti está quemando el motor del equipo física y mentalmente porque Casemiro, Kroos y Modric fueron un bocado delicioso para unos leones con hambre.

FRACASO DE LOS DELANTEROS

Lo peor fue el ataque, que no existió con tres delanteros que fracasaron. Sin sus dos máximos goleadores, porque Vinicius no estuvo salvo para entrar en peleas tras dejarse la energía con su selección y en los largos desplazamientos, el Madrid se quedó sin referencias. Rodrygo no pasa de poner buena voluntad y Asensio huyó del puesto de delantero para perderse en el limbo y aparecer solo en los últimos minutos aprovechándose del cansancio de un rival que lo apostó todo a la presión. Se acuerdan de Benzema y de Mendy, dos hombres importantes, pero no faltaron individualidades, faltó intensidad, jugar en equipo y hacerlo con el balón.

A estas alturas se acusa a Ancelotti de poner siempre a los mismos, cuando está siendo su práctica habitual toda la temporada. Como Zidane en sus dos tristes últimas temporadas, el italiano sigue el mismo patrón y no cuenta con los secundarios ni en un torneo como la Copa, reservado históricamente para los que menos juega. Lunin, Hazard, Ceballos, Bale… deben tenerle muy enfadado para que no aparecieran en San Mamés. Ninguno tiene nada que demostrar pero Carletto no les deja. Jugadores frescos que ni siquiera se digna a probar o medir su compromiso. Insiste en Asensio, Rodrygo, Casemiro o Kroos que no están en su mejor momento, o explotar a Vinicius hasta convertirlo en un delantero mediocre.