Alaba, Tchouameni y Mendy, desbordados en el Madrid

Los tres eran titulares indiscutibles para Ancelotti, pero las lesiones frenaron su continuidad y ahora tienen que volver a ganarse el puesto

Rudiger, Camavinga y Nacho se han reivindicado aprovechando la oportunidad de suplirlos y ponen al técnico italiano en un aprieto

ALMERÍA-REAL MADRID : El golazo de Alaba que define la victoria del Real Madrid

Alaba marca un golazo de lanzamiento de falta tras haber entrado al terreno de juego, el cual definió la victoria del Real Madrid ante el Almería / LaLiga

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

Se achaca a Carlo Ancelotti cierto inmovilismo en sus elecciones para configurar su once titular, que le han valido críticas en cuestiones puntuales. Una gestión en la que dejaba claras sus preferencias por mucho que quiera convencer al mundo de no tener un once titular, pero los datos demuestran lo contrario. Solo las lesiones han ofrecido una brecha a los suplentes para colarse por ella, en el intento de ganar posiciones en los favoritismo del entrenador. Tres de ellos, Rudiger, Camavinga y Nacho las han aprovechado para desbordar a Alaba, Tchouameni y Mendy a los que les visitaron los problemas físicos para perder el estatus de intocables.

El central austriaco no estaba viviendo su mejor temporada, con un rendimiento inferior al del año de su estreno en el que formó tándem con Militao para borrar las huellas dejadas por Varane y Ramos. Se lesionó el 21 de febrero ante el Liverpool, lesión muscular en el tercio distal del bíceps femoral derecho, para perderse seis partidos y dar la oportunidad a Rudiger de ocupar su lugar. El alemán, que ha vivido un periodo de adaptación que recuerda al de Militao, al ser cuestionado por el entorno madridista, ha demostrado ser un defensa serio, contundente y experimentado para ganarse el puesto. Ahora será Ancelotti el que tenga que decidir si mantiene al ex del Chelsea o recuperar al ex del Bayern.

CAMAVINGA, UNA APUESTA DE CLUB

La irrupción de Camavinga era más una apuesta del club que del propio Ancelotti. Un futbolista joven, inexperto y con lagunas de conceptos para encajarlo en un equipo en el que cada cual cumple un rol que él no acababa de desempeñar quizá por su ímpetu de juventud. Su polivalencia facilitó tener continuidad en varias posiciones para ir cubriendo ausencias por lesión o descansos a compañeros, para hacerse con un sitio en el equipo en detrimento de Tchouameni. La irregularidad de su compatriota y una lesión en el sóleo obligó al técnico italiano a buscar un relevo que no tenía en el medio centro tras la salida de Casemiro. Su vuelta al equipo ha estado marcada por esa irregularidad, por donde se ha colado Camavinga para competirle el puesto incluso en la selección francesa.

Mendy es el tercer hombre que ha perdido el paso por culpa de una larga lesión. Se rompió el 26 de enero perdiéndose 12 partidos consecutivos. Su baja coincidió con la de Alaba y a Ancelotti no le quedó otro remedio que buscar parches, Camavinga, o recambios similares, Nacho. El canterano, al que tenía olvidado en el rincón de los secundarios, andaba mosca por la escasa confianza que le había demostrado el técnico. Levantó la voz quejándose y puso en duda su renovación. Pero cuando le dio la oportunidad de jugar, porque no quedaba otra, Nacho volvió a demostrar que es un jugador útil, de recursos y con un nivel que nada tiene que envidiar a los preferidos del italiano. Tanto que su fútbol le ha dado para volver a la selección. Como Rudiger, Nacho es un relevo útil que pone en un aprieto a Ancelotti.