La afición 'traspasa' a Bale, Isco, Marcelo y Kroos

La afición del Real Madrid tiene claro el criterio que la directiva debería seguir a la hora de confeccionar la lista de bajas. Los que se sientan en las gradas del Santiago Bernabéu apostarían este verano por cuatro salidas de peso. Los nombres de Gareth Bale, Isco Alarcón, Marcelo y Toni Kroos están subrayados en rojo en esta lista de señalados.

El madridismo pide al club la venta del galés, el malagueño, el brasileño y el alemán en todas las encuestas que están apareciendo en los medios de comunicación tras haber completado una temporada lamentable.

Bale está en el punto de mira de la afición blanca desde hace un par de temporadas. Nadie le quiere: ni el club, ni el técnico, Zinedine Zidane, ni la afición. El problema es que a día de hoy el galés no está por la labor de marcharse y amenaza con poner las cosas difíciles exigiendo que le paguen la totalidad de su traspaso (51 millones de euros, a razón de los 17 millones anuales que tiene firmados hasta 2022).

sin careta

Otro caso singular es el de Isco. El malagueño se ha quitado la careta y se ha mostrado desafiante y perezoso a lo largo de toda la temporada. Su pésima campaña ha indignado a la afición. El único que le avala a día de hoy es Zidane, que es el que manda. La directiva, en cambio, es partidaria de traspasarle y se ha quedado sin apoyos en la grada.

Marcelo también es un fijo en todas las encuestas que se hacen entre los madridistas para ser vendido. No le perdonan que se haya abandonado siendo uno de los capitanes y un peso pesado de la plantilla. Su ejemplo ha sido nocivo pese a la buena relación que mantiene con el resto del vestuario.

La edad del brasileño, 31 años, el desgaste de su posición y haber pedido al club que le vendiera a mitad de temporada son las razones por las que los aficionados apuestan por su salida.

El último caso, posiblemente el más curioso, es el de Kroos. El alemán ha cumplido con el balón en los pies, pero no sin él. Ha tenido muchas lagunas en defensa y ha sido un lastre para el equipo. Igual de los demás, su físico le ha traicionado y ha rendido muy por debajo de su nivel. Por ese motivo su renovación ha extrañado a todos, aunque ha quedado claro que cuenta con el apoyo del club y de Zidane. Su caso divide a la afición.