Serge Aurier: "En el PSG me sentía encarcelado"

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Serge Aurier afronta su fichaje por el Tottenham como una gran oportunidad para empezar de cero tras su complicado final como futbolista del PSG. Sus problemas comenzaron en febrero de 2016, cuando criticó a Laurent Blanc,  entonces entrenador del equipo parisino y a algunos de sus compañeros, entre ellos Ibrahimovic, en un vídeo emitido por Periscope. El club le prohibió hablar con los medios de comunicación y prácticamente estuvo apartado de la plantilla. 

Con la llegada de Unai Emery, los conflictos no cesaron y tras un encontronazo con el técnico español, el club le invitó a buscarse la vida en otro destino. Los 25 millones de euros que pagó por el el club londinsense le ayudó a encontrar esa vía de escape.

Ahora, Serge Aurier da su versión sobre su salida del Paris Sain Germain en un video que el jugador ha  publicado en Youtube.

En el vídeo, el marfileño explica que el PSG reconsideró su readmisión después de haber "faltado al respeto al club" parisino y asegura que aunque trató de demostrar su valía y hacer una buena temporada, "me encerré en mí mismo en un culebrón que duró más de un año". "Me sentía encarcelado, no podía hacer nada más", añadió.

"Mi decisión se tomó en relación con un problema que todos conocemos", explicó el defensor, refiriéndose al vídeo en el que había insultado a Laurent Blanc y a algunos de sus compañeros. "Estaba preso y desde entonces no podía hacer nada más, no podía expresarme. No podía hablar con la prensa, me estaban callando. Era una telenovela que no iba a terminar. Una historia que duró más de un año", explica el defensa en el vídeo-entrevista.

Pese a todo, Aurier dedicó unas palabras de elogio y respeto para Nasser Al-Khelafi, el propietario del PSG: "Mi forma de agradecerle fue quedarme y hacer una gran temporada dando el máximo pero ya no me sentía cómodo porque tenía que tener cuidado. Se había vuelto doloroso, porque antes de todo eso, yo era una persona natural", relata el futbolista africano.

Aurier explica que la situación llegó a tal punto que, a pesar de que le quedaban dos años de contrato, necesitaba cambiar de aires y volver a empezar de nuevo. "Tenía que encontrar algo que me hiciera feliz, algo que me hiciera querer hacer lo que mejor sé hacer: jugar al fútbol. Hubo un momento en el que ya no me estaba divirtiendo, así que me di cuenta de que era hora de irme", concluyó Serge Aurier, ansioso por hacer su debut con la camiseta del Tottenham.