La Premier dinamita el mercado

Con el fichaje de Grealish, los clubes ingleses han invertido 777 millones de euros en nuevas incorporaciones

Multiplica por seis la inversión de La Liga (130 millones) y registra más del doble que la Bundesliga (309 millones)

El City confirmó el bombazo del verano

El City confirmó el bombazo del verano / AFP

Pol Ballús

Pol Ballús

El Manchester City confirmó este jueves el fichaje de Jack Grealish, uno de los bombazos del verano en Inglaterra, tras 24 horas frenéticas. La operación se ejecutó a partir de un vuelo privado hacia Manchester el pasado miércoles, y acabó en la revisión médica, firma y anuncio oficial este jueves. Los ‘citizens’ han convertido a su última adquisición en el fichaje más caro de la historia de la Premier League, 117 millones de euros, aunque probablemente no lo sea por mucho tiempo.

En las próximas horas se espera que el Chelsea haga una ofensiva definitiva para reclutar a Romelu Lukaku. El delantero del Inter, al que los ‘blues’ vendieron por 35 millones en 2014, supondrá una inversión incluso superior a la de Grealish. En Inglaterra se habla de más de 120 millones. Y todo esto, con el culebrón de Harry Kane en plena ebullición, que podría desembocar en otro macrofichaje. La confirmación de que ni los efectos de la pandemia evitan que la Premier League dinamite el mercado de fichajes.

No es sólo que puedan romper hasta dos o tres veces su cantidad récord por un traspaso. Es que la diferencia con el resto de ligas europeas dibuja la existencia de dos mundos paralelos: el de la Premier y el del resto de Europa.

Según datos de Transfermarkt, tras el fichaje de Grealish el campeonato inglés ha invertido 777 millones de euros en incorporaciones. La segunda liga en el ranking de gasto es la Bundesliga, con menos de la mitad: 309 millones de euros. Aún así, en Alemania es mayor la cantidad percibida por ventas (354 millones) que la gastada en llegadas.

La Serie A italiana es la tercera competición de la lista con 290 kilos gastados, mientras que La Liga ocupa la quinta plaza (130 millones) y es claramente superada por la Ligue 1 francesa (281 millones).

Hace más de una década que el fútbol inglés exhibe músculo económico en cada ventana de traspasos, superando al resto de países a nivel de inversión, pero este año la diferencia se ha hecho más sangrante. Mientras clubes como Barça o Madrid tienen que enfocarse en la reducción de costes y salarios, el Aston Villa lleva gastados 112 millones en nuevos fichajes, que se quedarán cortos con la inversión que prevén hacer ahora tras vender a Grealish.

Porque las macrooperaciones como la del inglés, Lukaku o Harry Kane son la punta del iceberg. El Manchester United ha invertido cerca de 140 millones en Jadon Sancho y Raphael Varane. El Arsenal gastó 58 kilos en Ben White, prometedor central del Brighton con una internacionalidad en su carrera, y el Tottenham cerrará la llegada del central argentino Romero por 50.

La explosión de fichajes de la Premier provocará un efecto dominó en el resto del continente. Mientras el Inter ya piensa en el colombiano Duvan Zapata como sustituto de Lukaku, el Manchester City podría vender a Bernardo Silva tras la llegada de Grealish, con el Atlético de Madrid como candidato a hacerse con el portugués. O incluso se pone en duda el futuro de Paul Pogba, en su último año de contrato con el United y con el PSG muy atento a su situación. La única certeza es que, un verano más, Inglaterra es el inicio y el fin de todo lo que se cuece en el mercado de fichajes.