¿Por qué Guardiola entrenará más años al City que al Barça?

Pol Ballús

Pol Ballús

El nuevo contrato que firmó Pep Guardiola con el Manchester City, que le ata en Inglaterra hasta 2021, llevará al catalán a cumplir un ciclo de cinco temporadas en la Premier.

Nunca en su carrera había renovado por más de una temporada y, en caso de cumplirse, viviría el ciclo más largo de su trayectoria en un banquillo. Más incluso que en el del Barcelona, donde pasó cuatro años. La pregunta que se hace ahora mucha gente es: ¿Por qué Guardiola entrenará más años al City que al Barça? Estas son algunas de las claves.

La dupla Txiki-Soriano

No es ningún secreto que la relación de Pep Guardiola con las altas esferas del City, especialmente Txiki Begiristain y Ferran Soriano, es excelente. Lo era antes de que el de Santpedor llegara a Manchester y se ha solidificado durante estos dos años.

Gente cercana a Pep Guardiola ha afirmado durante el año que “hay la mejor sintonía que ha tenido nunca en su carrera con una directiva, junto a la de su primera etapa en el Barça con Joan Laporta al mando”.

{"zeta-legacy-video":{"videoId":"10856457"}}El que vive con Pep más de cerca es, sin duda, Txiki Begiristain. Con pocas palabras les basta para entenderse, en una relación que se gestó desde el Dream Team. Hablan a diario en la ciudad deportiva y planifican continuamente el futuro del club. A Txiki no le gusta perderse ni un entrenamiento. Baja al césped siempre, cuentan en la City Football Academy, y habla con Pep de lo que haya pasado durante el día. También lo hace después de cada partido, bajando a los vestuarios para hablar con el entrenador. Tanto en los buenos momentos (esta temporada) como en los malos (la anterior).

El encaje con Ferran Soriano también es inmejorable. Más centrado en la parcela económica que en la deportiva, sabe gestionar a la perfección las necesidades de Pep. Se le ha dado espacio cuando lo ha pedido, y a la vez lo han convencido para sentarse a hablar cuando ha sido conveniente. Los mismos que le llevaron a Manchester, han sido decisivos para que echara más raíces.

Apoyo en decisiones claves

La confianza también le ha llegado desde esferas aún más selectas del Manchester City. Khaldoon Al-Mubarak, presidente del club y mano ejecutora del inversor Sheikh Mansour, ha forjado una gran relación con el catalán. Ha asistido en casi cada partido del City como local. Horas antes de los duelos, se reunía con el entrenador para hablar y transmitirle su apoyo. Un apoyo que se ha visto traducido en decisiones significativas. En Manchester, aún no se ha escuchado a nadie hablar mal de Khaldoon.

A principios de la temporada 2016-2017, antes de que Guardiola empezara su primera pretemporada,  fuentes del club negaban que se quisiera prescindir del portero Joe Hart, mito del club y titular con Inglaterra.

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Semanas más tarde, Pep empezó a trabajar y no le convencieron las prestaciones de su portero. Tomó la decisión de no contar con él, y el club lo acabó apoyando a toda costa. Ficharon a Bravo, no cuajo, y el siguiente mercado estival se recurrió a Ederson. No hubo dudas, pese a la presión mediática. El pasado mes de enero, ya con un gran margen de puntos en la Premier, Pep consideró que el equipo necesitaba reforzarse en defensa. El club volvió a hacer un esfuerzo, evaluó todas las opciones y acabó incorporando a Laporte.

Otro punto de inflexión llegó en abril de 2017, cuando Pep cayó en semis de la FA Cup y consumó su primer año sin títulos. “No puedo olvidar como me trató el club la temporada pasada, cuando las cosas no fueron tan bien. En el fútbol lo más débil siempre son los managers. La forma en la que el club me defendió mandó un mensaje muy importante. Dejó claro que yo era el manager de este club”, explicó Guardiola tras ganar este año la Carabao Cup. La confianza institucional en Pep y su forma de entender el juego ha sido impecable: ni una duda, ni un reproche, ni un rumor que haya cuestionado su rol.

Asentado en su entorno

Pep se ha encontrado en el City un equipo de trabajo difícilmente mejorable. Más allá de Domènec Torrent, Carles Planchart o Lorenzo Buenaventura, los que llegaron con él, la plantilla está rodeada de un grupo de trabajadores muy joven y hambriento de hacer algo grande.

El ímpetu con el que se trabaja diariamente en el First Team Building, edificio de la ciudad deportiva destinado a la plantilla de Guardiola, es contagioso. “Son las mejores instalaciones en las que he estado nunca”, reveló el catalán sobre las instalaciones, pero a nivel humano también se ha sorprendido. El personal ha asimilado a la perfección su llegada al club. Todo el mundo es consciente de que la intención es la de poner las bases de un proyecto a largo plazo, y se ha trabajado en este sentido.

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Por supuesto, su situación personal también acompaña. Felizmente asentado en un céntrico apartamento con su familia, Manchester es una ciudad que permite cierta actividad social sin mayores problemas. No es extraño verle pasear por el centro o frecuentar algún restaurante de la zona. El frío en invierno y la lluvia no los lleva tan bien, pero bueno.

Un caramelo de plantilla

“Tenemos una plantilla muy joven, con una media de 23 años. Queremos seguir dando pasos adelante y mantener el nivel mostrado esta temporada”. Fueron declaraciones de Guardiola en el comunicado que emitió el Manchester City para anunciar su renovación. El propio técnico destaca la juventud y el largo recorrido de una plantilla que también es un estímulo para seguir más años.

Raheem Sterling ha completado la mejor temporada de su carrera, Leroy Sané ha sido nombrado el Mejor jugador joven de la Premier League y completan el equipo nombres como Ben Mendy, Gabriel Jesus, Bernardo Silva, Aymeric Laporte o John Stones que no superan los 23 años. Kevin De Bruyne tiene solo 26.

A nivel generacional, la plantilla está en el momento perfecto para poner los cimientos a una nueva era. Insiste que la Premier es la competición más relevante. Dirigentes del club, en reuniones internas, convencen a su personal de la importancia de hacerse grandes y ganar en Europa.

A nivel humano, se insiste en los pasillos de la ciudad deportiva que es uno de los mejores vestuarios con los que ha trabajado Guardiola. Motivos suficientes para seguir alimentando su pasión, creer más en la dirección que lleva el club y hacer que Manchester le vea más años de los que le vio el banquillo del Camp Nou.