Otro mazazo de la Premier al mercado

El City ha sido el destino elegido por uno de los futbolistas más codiciados del mercado de fichajes

La Premier ofrece a las estrellas el escenario perfecto para brillar frente a los mejores equipos del mundo

Entrenador: Pep Guardiola

Entrenador: Pep Guardiola / EFE y AFP

EFE

El fichaje de Erling Haaland por el Manchester City asienta la superioridad de la Premier League sobre el resto de ligas a la hora de atraer 'cracks' y de ofrecer mejores condiciones a las estrellas del fútbol mundial.

El City ha sido el destino elegido por uno de los futbolistas más codiciados del mercado de fichajes y que decidía por sí mismo dónde recalar. En su mesa tenía diferentes ofertas, diferentes proyectos, pero al final, la Premier League, una vez más, ha sido el elegido.

Por condiciones económicas, por competitividad y por la posibilidad de que le entrene uno de los mejores técnicos del mundo. Una serie de aristas que no encuentran competencia en ninguna otra liga del continente y que la Premier sabe amplificar como ninguna.

No es solo cuestión de que el salario que percibirá el noruego sea de 400.000 libras semanales (500.000 euros) difícilmente igualable por muchos otros clubes europeos, es que la Premier le ofrece el escenario perfecto para brillar frente a los mejores equipos del mundo. Haaland pasa de la Bundesliga, en la que prácticamente su única competencia era Robert Lewandowski, a competir con Mohamed Salah, Sadio Mané, Luis Díaz, Harry Kane, Heung-min Son, Cristiano Ronaldo, Bruno Fernandes, Romelu Lukaku o Jadon Sancho.

Haaland ahora estará entrenado por Pep Guardiola, uno de los mejores técnicos del continente, en un equipo que opta cada temporada a los cuatro títulos, y vivirá en sus propias carnes las batallas tácticas con preparadores de la talla de Jürgen Klopp, Mikel Arteta, Antonio Conte, Erik Ten Hag y Thomas Tuchel. Un plantel de lujo para una liga que casi todas las semanas muestra un partido entre el 'Big Six' y en la que los derechos televisivos han impulsado la calidad de las plantillas hasta límites desconocidos.

Hasta 2.500 millones de libras (3.000 millones de euros) percibieron los equipos de la Premier la temporada pasada. Cifras de récord que explican por qué el City pudo pagar 100 millones por Jack Grealish, por qué el Chelsea le quitó a Lukaku al Inter de Milán por la misma cifra y por qué el Liverpool se hizo con Luis Díaz por 50 millones.

Futbolistas de los más valiosos del mercado, como Virgil Van Dijk, que costó 80 millones, Phil Foden, Salah, que renovará de forma millonaria con el Liverpool, Kevin de Bruyne, con un salario similar al de Haaland, Jadon Sancho, que costó 80 millones al United, Trent Alexander-Arnold, uno de los mejores laterales derechos del mundo, y Declan Rice, el próximo bombazo del mercado, eligen la Premier por encima del resto.

Incluso equipos como el Manchester United pueden permitirse pagar 80 millones por Harry Maguire sin que esto le desbanque como uno de los clubes más valiosos del mundo. Y esta posibilidad de gasto no se adhiere solo a los grandes. El Aston Villa fichó a Lucas Digne por 25 millones de libras (28 millones de euros) en invierno y a Emi Buendía por 40 millones en verano, el Leeds United se dejó 30 millones de euros en Dan James, y el Leicester City 26 por Patson Daka, del Salzburgo.

Esta tendencia, con clubes como el Newcastle United, que pagó 100 millones en invierno para mejorar la plantilla y salvarse del descenso, no va a ir a la baja y explica también por qué en tres años ha habido dos finales completamente inglesas en la Premier League y por qué solo una remontada imposible del Real Madrid en el tiempo añadido evitó la tercera. Ahora, con Haaland, el Manchester City suma argumentos para que eso no vuelva a ocurrir.