El Liverpool claudica en otro naufragio defensivo

Parecía que el Liverpool sólo podía ir a mejor, pero no. Los de Klopp cayeron de nuevo en la Premier, de nuevo goleados y de nuevo en medio de un naufragio defensivo. Les condenaron dos errores muy graves en defensa en el tramo final, que penalizaron Vardy y Barnes para desactivar el tanto inicial de Salah. Aunque más allá del resultado, la sensación que transmite el Liverpool es la de un bloqueo supremo.

leicester-liverpool 20/21

Premier League

LEI

3

1

LIV

Alineaciones

Leicester
Schmeichel; Amartey, Evans, Soyuncu; Pereira, Tielemans (Choudhury, 87'), Ndidi, Albrighton (Ayoze, 74') (Mendy, 90'); Maddison, Barnes; Vardy.

Liverpool
Alisson; Alexander-Arnold, Kabak, Henderson, Robertson; Milner (Thiago, 17'), Wijnaldum (Shaqiri, 87'), Jones (Oxlade-Chamberlain, 75'); Salah, Firmino, Mané.

Goles

0-1 M. 67 Salah. 1-1 M. 79 Maddison. 2-1 M. 81 Vardy. 3-1 M. 85 Barnes.

Árbitro

Anthony Taylor. TA: Evans (43') / Jones (24'), Kabak (71').

Incidencias

King Power Stadium. Puerta cerrada.

No recordará su debut con los ‘reds’ el central Kabak. Tras llegar en el mercado invernal, Klopp le hizo debutar en el King Power Stadium. Todo le fue relativamente bien, hasta los diez últimos minutos de partido. Con el partido empatado, un malentendido con Alisson, también señalado, convirtió un despeje expeditivo en una asistencia a Jamie Vardy. El delantero inglés entró a placer hasta la red para poner el 2-1 en el marcador.

Antes del descalabro, el Liverpool era el dueño de la posesión, pero seguía echando de menos su finura ofensiva. Vardy perdonó hasta cuatro llegadas en el primer tiempo, mientras Salah capitalizaba las mayores incursiones ‘reds’. El marcador no se abrió hasta el segundo tiempo: ante la falta de ideas, un fogonazo de Firmino y Salah fue suficiente. El brasileño se revolvió en el área para ceder una asistencia de ruleta al egipcio, que culminó con un tiro enroscado a la red de Schmeichel.

El Leicester tuvo que asumir el control, pero demostró que tiene argumentos para hacerlo. Empezó la remontada con una falta lateral de Maddison, que no tocó en nadie pero se envenenó tanto que acabó en la red. Al minuto, llegaría el error de circo entre Alisson y Kabak con el que Vardy obró la remontada. Y la sentencia la puso Barnes, de nuevo ensañandose con una defensa descompensada y llegando a placer para cruzar el balón ante Alisson. La goleada contra el City fue un revés imponente, pero el hundimiento de Leicester es el punto de inflexión para un Liverpool que sigue a la deriva.