El Leicester no levanta cabeza y sucumbe en Goodison Park

Sigurdsson marcó el 2-0 desde los once metros

Sigurdsson marcó el 2-0 desde los once metros / EFE

Roger Payró

A pocos equipos le han sentado peor el parón que al Leicester. El conjunto de Brendan Rodgers sigue sin ganar y este mismo miércoles podría perder la tercera plaza si el Chelsea gana al West Ham (21.15h). De hecho, la zona Champions se le puede empezar a complicar si no hay un cambio de rumbo. Dos de los últimos doce puntos posibles dejan tocado a un equipo que en Goodison Park (2-1) acusó los tempraneros tantos de Richarlison y Sigurdsson. Ihenacho escenificó el intento de remontada.

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Premier League

2
1
Alineaciones
Everton
Pickford; Coleman, Keane, Holgate, Digne; Iwobi (Mina, 68'), André Gomes, Sigurdsson, Anthony Gordon (Bernard, 79'); Calvert-Lewin y Richarlison (Davies, 57').
Leicester
Schmeichel; Justin, Evans, Söyüncü, Chilwell; Ndidi; Albrighton (Gray, 81'), Tielemans (Ayoze, 81'), Praet (Maddison, 46'), Barnes (Iheanacho, 46'); y Vardy.

Dos jugadas aisladas le valieron a los ‘toffees’ para vivir de rentas a lo largo de todo el duelo. Primero fue el canterano Gordon, que profundizó por banda izquierda, levantó la cabeza y vio llegar a Richarlison como una exhalación en el corazón del área. Ahí el brasileño no perdonó fusilando a Schmeichel. Y apenas tres minutos después, una falta colgada al área se convirtió en pena máxima a favor por unas manos incomprensibles de Ndidi que cazó el VAR.

Era el primer penalti que le pitaban a favor al equipo de Liverpool desde marzo de 2019. Ahí es nada. Sigurdsson lo transformó y, casi sin quererlo, el cuadro de Ancelotti se encontró con un 2-0 arriba en el primer cuarto de hora. Y desde entonces, a vivir de rentas.

El Leicester tomó el control del duelo aunque le costó generar peligro en las inmediaciones de Pickford. Solo Evans, en un balón que se enocntró tras un córner, puso en aprietos al meta. Brendan Rodgers sacudió al equipo en el descanso dando entrada a Maddison e Iheanacho y el campo se inclinó aún más a favor de los ‘foxes’. Hasta el punto de que en el 51’ el marcador ya era de 2-1.

Iheanacho cazó un balón en el área y fruto de su empeño logró que el despeje de Holgate impactara en su rostro y el balón se introdujo al fondo de las mallas. Tenía mucho tiempo el Leicester para lograr al menos el empate, pero nunca acabó llegando. Maddison, que fue una piedra en el zapato, nuevamente Iheanacho e incluso Ayoze, una de las últimas balas visitantes, lo intentaron sin premio. No penalizaron un par de ‘cantadas’ de Pickford, portero irregular donde los haya. En una de esas, no blocó un balón lateral y Keane casi se la mete en propia.

Ni los seis minutos de añadido bastaron para lograr una última ocasión donde rascar algo. El Leicester mereció algo más pero la realidad es que sigue sin sumar de a tres. El Everton, por su parte, se consolida en la zona media de la tabla.