Klopp cumple años en Anfield

Prendió las dos llamaradas que decoran el escudo del Liverpool cuando el barco se hundía, hizo creer a la entregada afición ‘red’ cuando los proyectos fracasaban año tras año y se metió a la exigente directiva de Anfield en el bolsillo con un discurso humilde, optimista y repleto de sentimiento: “Esto no es tan complicado como la gente de esta sala piensa. No es el momento perfecto, pero es un buen momento para venir”. 

Y ahora Anfield ya nunca le dejará caminar solo. Hoy se cumplen cinco largos años desde que un tipo barbudo, de sonrisa perfecta y gafas de pasta diera un golpe encima de la mesa y dijera: ‘¡Hasta aquí’! Adiós al Liverpool de los lamentos, de los fichajes multimillonarios por medianías, de los Andy Carroll, Benteke, Downing y compañía.

Hoy hace cinco años desde que Klopp asumió el mando y apostó por un proyecto a largo plazo, basado en un estilo de juego marcado por el ‘rock and roll’, un mercado de fichajes buscando piezas concretas y una mentalidad ganadora, acorde a la grandeza del club. Cinco años más tarde, la prensa británica ya lo tiene sentado en la mesa de los Shankly, Paisley, Dalglish y compañía.

Y la afición lo tiene como su gran líder. Solo hace falta ver la forma de celebrar los goles. La comunión es perfecta. Discurso, juego y resultados. ¿Qué más se le puede pedir? ¿Títulos? Ahí están. Pocos proyectos se han mantenido tan sólidos habiendo perdido las primeras tres finales disputadas. Es lo que tienen los proyectos serios, que por mucho que pierdas las finales de Carabao y Europa League del 2016 y la de la Champions de 2018 ante el Madrid, siguen adelante. 

Los ‘reds’ creyeron en Klopp y las piezas fueron encajando como un puzzle. El punto de inflexión fue la llegada de Van Dijk en enero de 2018, erigiéndose como pilar indiscutible en el engranaje ‘red’ y gran mariscal en la zaga. Luego llegó Alisson, que terminó de cerrar un once titular que se ha movido más bien poco en los últimos meses. Ahora solo la llegada de Thiago parece que puede tocar algo. Hablábamos antes de títulos, pues Klopp logró el que más importante para el fútbol británico: la Premier League.

No la habían ganado los ‘scousers’ desde el cambio de nombre, hace ya más de 30 años. Una liga sencillamente espectacular. Imposible de repetir. También levantó la Champions, la temporada anterior (2019), donde estuvieron a punto de lograr la Premier. Fue la temporada de la remontada al Barcelona. La noche de Liverpool. La noche de Klopp. La noche que enseñó al mundo a no darse por vencido. Klopp se sienta en la mesa de los grandes y aún le queda cuerda.