Inglaterra, la trituradora infinita

La BBC reveló esta semana que el Arsenal ha fichado a un niño de 4 años para su cantera

Es difícil de entender qué tipo de favor se le hace a un niño de esa edad involucrándolo en una industria tan voraz como la del fútbol

Niño Arsenal 4 años

El pequeño Zayn Ali Salman posa junto al ex defensa 'gunner' Per Mertesacker. / Zayn Ali Salman

Pol Ballús

Pol Ballús

El desastre que causó el Liverpool de Klopp en Old Trafford ha capitalizado toda la resaca del fin de semana de fútbol en Inglaterra, y con razón. La afición del Manchester United tiene motivos para estar preocupada. Sin embargo, la semana arrancó con una noticia que quizás no sólo debería preocupar a los diablos rojos, sino a toda Inglaterra.

La BBC sacó la noticia: el Arsenal ha fichado para su cantera a un niño de, atención, 4 años. Lo han leído bien: 4 años. La noticia, por llamativa, corrió por todos los portales y medios nacionales e internacionales. El artículo original contaba como Zayn Ali Salman, apodado “el pequeño Messi”, era un niño londinense que jugaba en el equipo de su barrio con niños que le doblaban la edad, y aún así era capaz de ser mejor que el resto hasta que su talento llegó a ojos de un ojeador del Arsenal, que no quiso desaprovechar la oportunidad.

Lo más complicado es encontrar explicación a la cobertura que se hizo de la noticia desde el medio público inglés. Grabaron un mini-documental de tres minutos, con declaraciones del propio niño de cuatro años, de su padre, del entrenador en el equipo del barrio, e incluso del ojeador del Arsenal, más que orgulloso de haber sido capaz de reclutar tal talento.

“Aquel niño hacía cosas impropias para su edad, así que llamé a mi contacto en el Arsenal. Cuando dije que tenía cuatro años, mi contacto no se lo creía. Nos fuimos rápidamente a hablar con sus padres y lo fichamos”, sentenció con orgullo Stephen Deans, ‘scout’ del Arsenal. No contentos con ello, apareció en el video el padre del niño para afirmar que “desde que nació sabíamos que era un niño especial”.

Es difícil de entender qué tipo de favor se le hace a un niño de 4 años involucrándolo en una industria tan voraz como la del fútbol, habituada no sólo en destrozar talentos, sino en generar traumas en chavales que no están preparados para vivir ese tipo de presión.

En Inglaterra, los talentos de las grandes canteras firman su primer gran contrato a los 16 años. Un contrato que significa tanto dinero que no sólo muchas familias pueden depender de él, sino que agentes y representantes se esfuerzan para captar jugadores lo más pronto posible y cobrar también su comisión en estas firmas. Un terrible círculo vicioso, que ya ha tenido terribles consecuencias.

Esta semana se cumplió un año de la trágica muerte de Jeremy Winsten, un ex canterano del Manchester City que se suicidó con 17 años tras sufrir una profunda depresión generada, en parte, por no haber cumplido las expectativas en el fútbol. Un ejemplo dramático del que, si se quisiera tomar nota para que no vuelva, exposiciones como la de Zayn Ali Salman no deberían ni existir.