De Gea y Rashford prolongan el efecto Solksjaer

Marcus Rashford anotó el gol del triunfo en Wembley

Marcus Rashford anotó el gol del triunfo en Wembley / AFP

Pol Ballús

Una exhibición de De Gea y el gran momento de Rashford tumbaron al Tottenham de Pochettino. El Manchester United sigue en estado de gracia con Solkjaer en el banquillo: seis victorias en seis partidos y la confirmación de que la salida de Jose Mourinho ha dado oxígeno al equipo. Los londinenses, en cambio, se alejan de la cabeza de la Premier.

Solksjaer renunció a Lukaku para salir con sus tres atacantes más en forma: Lingard, Rashford y Martial respaldados por Pogba. Los 'spurs' les recibieron con su once de gala y esto, en Wembley, les otorga casi siempre el cartel de favoritos.

Empezaron avisando los londinenses, advirtiendo en intercambios de posiciones y llegadas al área desde segunda línea. Winks perdonó una llegada clara que podía haber cedido a Eriksen, y Kane marcó un gol que fue anulado por fuera de juego. Pero el choque estaba más que abierto, en gran parte, porqué este Manchester United es otro: más ordenados en defensa, más amenazantes en ataque.

La primera visitante la tuvo Lingard, que se llenó de balón y disparó a las nubes, pero la cosa cambió cuando la tuvo Rashford. Falló Trippier una entrega al centro del campo, que recuperó Pogba. El francés lanzó una contra de forma magistral, en un pase para la carrera de Rashford, que desbordó a su marca y cruzó ante Lloris. La rozó el meta francés, insuficiente para parar un gol psicológico en el minuto 45.

Ni asestar un golpe así suele ser suficiente para tumbar al Tottenham en su casa, y estos lo demostraron saliendo en tromba en la segunda mitad. Fue entonces cuando apareció el mejor David De Gea. Empezó con dos paradas a Kane y a un cabezazo de Dele Alli, preludio de la exhibición que vendría. Las sacó de todos los colores, un total de 10 paradas en el tipo de actuaciones que lo justifican como uno de los mejores del mundo. Se desesperaron Son, Eriksen y el propip Kane, incapaces de derrumbar un muro que los aleja de la liga.

Ahora los ‘spurs’ quedan a nueve puntos del Liverpool, y el City se podría poner a cinco. En el lado rojo de Manchester, en cambio, aspirar a la zona Champions ya no parece tan imposible.