Argentina, campeona del Mundial de pádel masculino 2024

Argentina se proclamó campeona del Mundial de pádel masculino tras una final de infarto frente a una Argentina que supo sobreponerse a todas las adversidades para revalidar el título que ya consiguión en 2022.

España ganó en el primer duelo de la final ante Argentina.Salió Juanjo Gutiérrez con Arturo Coello y Coki Nieto, una dupla inédita en lo que se convirtió en una apuesta arriesgada. Enfrente tenían a los 'Superpibes' Martín di Nenno y Franco Stupaczuk, una pareja que jugó muchísimo tiempo junta y que generaba mucho respeto.

Pero la realidad en la pista central del Khalifa Complex de Doha fue que la dupla española se convirtió en un auténtico vendabal ante los argentinos con un 'Stupa' muy errático que prácticamente entregó el partido a los españoles.

Coki y Arturo, con una efectividad aplastante

En el primer set España rompió el servicio de los argentinos de entrada y ya no abandonaron nunca la iniciativa para acabar con un contundente 6-1. Coki Nieto estuvo inconmensurable muy bien acompañado por un Arturo Coello que abarca tanta pista que superarle se convierte en una quimera en cada punto.

En la segunda manga, repetición de la jugada. Dominio abrumador de España, un 6-2 y España ya tenía el primer punto. Se consiguió, sin duda, mucho más fácil de lo que cualquier previsión podía tener los más de 4.000 espectadores que se congregaron en la central.

El partido del morbo con la dupla Lebrón-Galán

Llegaba después de tan solo 53 minutos el segundo partido. El del morbo. Juan Lberón y Alejandro Galán volvían a jugar juntos después de la polémica que protagonizaron en este mismo escenario el mes de marzo y que acabó con su ruptura en Acapulco.

Después de que el seleccionador asegurara en rueda de prensa el día anterior que "es imposible que jueguen juntos Galán y Lebrón" este sábado se retractó y optó por esa dupla entre dos jugadores que en la actualidad no tienen ningún tipo de relación. Pero para la final aparcaron sus diferencias y se enfocaron en el partido ante Agustín Tapia y Fede Chingotto. Tenían mucho trabajo por delante.

Fue un partido de alto standing. Igualdao, emocionante, con jugadas de auténtico lujo... un cinco estrella de manual. El primer set se decidió en el tie break y fueron los argentinos quienes contemporizaron mejor y, con menos errores no forzados se llevaron el premio de dar primero y ganar el primer set 7-6 (6).

Alejandro Galán no estaba por la labor de dejar escapar el partido y en la segunda manga se puso los galones y con su gran abanico de recursos llevó a la pareja a empatar el partido bien secundado por Lebrón y prácticamente duplicando los winners de Tapia y Chingotto, a los que los españoles desconectaron por momentos.

Vuela el segundo punto hacia Argentina

Lo más difícil estaba conseguido, pero faltaba poner la guinda en el set de desempate. No arrancó bien para Galán y Lebrón que vieron como Chingotto y Tapia les rompían el servicio en el segundo juego para poner el 2-0 en el marcador. Tuvieron la oportunidad de conseguir el contrabreak en el siguiente, pero no lo lograron. Subió el 3-0 en el marcador. Se recuperó algo la dupla española pero la inspiración y la fe de los argentinos, desde luego con un talento descomunal subieron el 5-2 en el marcador.

"No tengáis miedo, sois los más peligrosos", les decía Juanjo Gutiérrez a Galán y Lebrón en el banco. No surtió efecto y España perdió el segundo partido. La fórmula del engaño del entrenador español no funcionó y Argentina sometió a Lebrón y Galán por 7-6, 3-6 y 6-2.

Derrota de Paquito Navarro y Mike Yanguas

España se lo tuvo que jugar todo a la carta de Paquito Navarro-Mike Yanguas ante los bombarderos Tino Libaak y Leo Augsburguer, dos jóvenes perlas argentinas cuya agresividad en la pista es temida por todos los jugadores. Se enfrentaban dos estilos muy distintos de juego. La del pádel madurado y más tradicional de Paquito, de trabajar los puntos, junto a Yanguas que sí que es más pegador pese a jugar en el drive, ante el showpadel de Libaak/Augsburger que acortan los puntos todo lo que pueden para tener el premio inmediato.

Pero si alguien vive un Mundial con pasión este es Paquito Navarro que perfectamente secundado por Yanguas logró el primer set por 6-3. Los compañeros lo celebraron saltando con un corro... confiaban plenamente en Paquito y Mike.

Rompieron el servicio los argentinos (4-2) , contragolpearon los españoles (4-3), la emoción era máxima pero también la tensión, los nervios, la presión... y el espectáculo llegó. Una bolea increíble de Yanguas, un por cuatro de Augsburger desde la línea, la cuchilla de Navarro, recontraparedes, de todo un poco. Los españoles equilibraron el duelo (4-4) pero los niños argentinos acabaron empatando el duelo (5-7).

Otro partido que se iba al tercer set para poner más picante a la final. Fue en el siempre fatídico séptimo juego cuando España logró romper el servicio de Argentina pero los albicelestes respondieron con la misma moneda (4-4). Se llegó al 5-4, 15-0 para Argentina cuando Leo Augsburger se lesionó el gemelo de la pierna derecha. Quiso continuar pero lo hizo muy mermado. Se llegó al 5-5, le trataron los médicos, siguió en pista y tirando de pundhonor lograron el 6-5.

Se llegó al tie break, pero parecía que la lesión había afectado más a Paquito que a Leo. Y saltó la sorpresa Leo y Tino, dos jóvenes completamente inexpertos, dieron el punto decisivo a Argentina tras ganar por 3-6, 7-5 y 7-6 (1) a Paquito y Mike revalidando la corona de campeones para la albiceleste.