Zidane humilla al indolente Bale

Mucho hablamos y escribimos (y con razón) sobre el fracaso del Barça en los fichajes de futbolistas ‘cienmillonarios’ como Dembélé, Coutinho o incluso Griezmann. Pero nada comparable con lo que le sucede al Madrid con Gareth Bale. El caso del delantero galés resulta especialmente escandaloso. Su fragilidad física le ha pasado una tremenda factura desde el primer día: ha sufrido un total de 23 lesiones y ha estado 430 días de baja en las siete temporadas que lleva en el club blanco. Su cotización se ha desplomado y su precio de mercado ha caído en picado: en solo dos años ha pasado de los 90 millones de euros a los 28. 

El ‘niño mimado’ de Florentino Pérez, a quien el presidente ha defendido siempre a capa y a espada a pesar de su dudoso rendimiento, es hoy un gran problema económico para el Madrid. Es el futbolista mejor pagado de la plantilla (30 millones de euros brutos por temporada) y uno de los que menos juega, especialmente con Zidane. El técnico francés le ha apartado del equipo por su indolencia: piensa más en el golf que en el fútbol. Esta temporada, entre lesiones y suplencias, solo ha disputado 20 partidos (y ha marcado 3 goles).

Esta campaña ha sellado la confirmación de la decadencia del galés, que tuvo la puntilla definitiva ayer cuando ni siquiera entró en la convocatoria para el decisivo partido de Champions contra el Manchester City. Una humillación que parece que tampoco le preocupará demasiado a Bale, que ya hace demasiado tiempo que se ha dejado ir...

La devaluación económica ha ido a la par de su hundimiento futbolístico y ahora no hay quien quiera ficharle. Le queda todavía un año de contrato y su salida del Madrid no será nada fácil. De hecho, ya se intentó traspasarle el pasado verano y Florentino no encontró comprador. Ahora ya está pensando en regalarlo. Pero, cobrando lo que cobra, creo que no se lo quitará de encima ni así...