Victoria muy trabajada del Barça

El trabajo colectivo fue clave para superar a los serbios

Barça

Barça / sport

Nacho Solozabal

Nacho Solozabal

El Barça sudó más de lo previsto para ganar al Estrella Roja. Un primer cuarto soberbio de los blaugranas presagiaba un duelo sin demasiadas incertidumbres. Pero Pesic hizo muchas rotaciones en el segundo cuarto, hubo un cierto relajamiento, y el equipo se resintió. No fue una solución devolver a pista a los hombres más habituales, ya que para entonces el equipo había perdido el control del partido y, sobre todo, las buenas sensaciones de los primeros minutos.

El Barça se acostumbró a ir a remolque en el marcador incapaz de controlar al eléctrico perímetro serbio con la pareja Punter-Brown es estado de gracia. Pero también por dentro, tanto Gist como Stimac, superaban a los pívots del Barça. Los cambios ordenados por Pesic fueron constantes, como si buscara a los jugadores que le dieran estabilidad al equipo. Al final, de la mano de Abrines, Ribas y Oriola, en defensa y ataque, llegó la tranquilidad en forma de victoria.

GRAN DINÁMICA DE ESFUERZO

Nunca bajan los brazos. Hasta en los peores momentos, el equipo se esfuerza para revertir la situación. Ante el Estrella Roja, el Barça no hizo su mejor partido, pero la imagen que el grupo transmitió fue de esfuerzo constante y sin descanso. Pesic, últimamente, va repitiendo que les falta físico. No obstante, puede que haya problemas a resolver más acuciantes. Por ejemplo, al equipo le cuesta mantener una defensa compacta durante muchos minutos. Y no creo que sea por un problema de potencia, sino más bien porque cuando se sitúan por delante en el marcador levantan el pie del acelerador.

Algo así fue lo que sucedió ante el Estrella Roja en el segundo cuarto. La ventaja, en este caso, es que el público del Palau ayudó lo suyo, y los serbios están lejos del nivel de los blaugranas. El objetivo del Barça es entrar entre los cuatro primeros y tener el factor pista en el play off. Y está sin duda a su alcance.