Victoria balsámica de cara al Mundial

La épica sigue acompañando a España. Luis Enrique revolucionó la selección para intentar ganar a Portugal y clasificarse, de esta forma, para la ‘final four’ de la Nations League. Hasta siete cambios con respecto al duelo contra Suiza, que acabó con una sorprendente y dolorosa derrota. El técnico asturiano alineó solo a un blaugrana en el once titular: el intocable Ferran Torres. Eric Garcia quedó fuera de la convocatoria y Jordi Alba, Busquets, Pedri y Gavi se sentaron en el banquillo, aunque el tridente del centro del campo tuvo que salir en la segunda parte para darle personalidad y profundidad al combinado estatal. El objetivo no era otro que sacudir, de forma contundente, el equipo en busca de un triunfo balsámico. Una victoria que sirviera, por encima de todo, para recuperar sensaciones.

Costó. Mucho. Pero se logró. Con un tanto agónico de Morata que desató la euforia del entrenador, que se sabía señalado. Ese gol vale su peso en oro porque otorga mucha tranquilidad a solo dos meses del Mundial. Siguen habiendo dudas en torno al rendimiento de España, pero ganando a Portugal se taparon las voces más críticas del entorno y ahora Luis Enrique tendrá tiempo para tomar las decisiones que le permitan llevar a Qatar al mejor equipo posible. Porque la selección española es una de las favoritas para ganar la Copa del Mundo. Junto a Brasil, Argentina, Francia y la eterna Alemania. De este quinteto debe salir la campeona. Cualquier otra cosa sería una sorpresa gigantesca. 

Pero la falta de gol continúa siendo preocupante. El técnico asturiano tiene delanteros donde elegir para solucionar este déficit, pero todo dependerá de la evolución física de algunos futbolistas en las próximas semanas. Como es el caso de Ansu Fati. El blaugrana, que sigue jugando en cuentagotas en el Barça, no entró en la última convocatoria de España porque Luis Enrique consideró que no estaba en condiciones. Tampoco la presencia de Borja Iglesias, segundo máximo realizador de la Liga tras Lewandowski, ha solventado este problema. Y solo le falta probar con Iago Aspas, tercero en la clasificación del Pichichi.

Al fútbol español le falta gol y eso se traslada, lógicamente, a la selección. Y sin gol es difícil ganar partidos y aún menos un Mundial. Todas las esperanzas están depositadas en la recuperación total de Ansu Fati. Tiene talento y capacidad ofensiva para ser el 9 titular de la selección. Pero necesita mejorar físicamente. Veremos si se cumplen las expectativas. Las de España. Y, por supuesto, las del Barça. Mientras tanto, a seguir apostando por Morata, que ayer volvió a marcar un gol decisivo.