Vender para comprar

Mohamed Salah (LIverpool) está en la agenda del Barça y del PSG

Salah marcó el segundo / EFE

Alfredo Martínez

Alfredo Martínez

Parece que fue en tono de broma pero en una reunión de junta directiva alguien deslizó la posibilidad de vender a un jugador para sanear la economía y afrontar nuevos retos. Las cifras económicas del Barcelona asustan. No solo no puede pagar nuevas fichas sino que su actual saldo es negativo en 144 M de €. Vamos, un auténtico drama. Surge la pregunta: ¿Qué hacer en esta situación para fichar y reforzar al Barcelona de cara a la próxima temporada?

Las alternativas son: vender patrimonio o derechos, en forma de acuerdos para la venta de derechos televisivos como sería firmar el acuerdo por CVC o firmar patrocinios como el de la camiseta del primer equipo y el nombre del estadio con Spotify. Pero, aún así, podría no ser suficiente para acometer las deseadas gestiones para incorporar a uno de los grandes delanteros del fútbol europeo. Un gran refuerzo.

Traer a los Mbappé, Haaland o incluso Lewandowski o Salah, supondría una inversión económica que en estos momentos el Barcelona no podría acometer según ha reconocido su propio presidente. Entonces y en esta situación, ¿Debe el Barcelona vender algunos de los jugadores que tiene en la plantilla y tener plusvalías para con ellas poder acometer el fichaje de un futbolista mediático?

Y no me refiero a un actor secundario, no. El mercado sabe quien interesa y quien no. No sirve desprenderse de un jugador menor o poco utilizado para tratar de sacar ese dinero con el que invertir en un nuevo fichaje. Todos sabemos los nombres a los que nos estamos refiriendo. El Barcelona solo podría poner en el aparador a los Pedri, Gavi, Araujo, Ansu Fati o como mucho, Nico para tratar de sacar el rendimiento suficiente como para acometer la incorporación de un delantero de los llamados mediáticos del fútbol mundial.

Todas las opiniones son respetables y parto de la base de que cualquiera de los jugadores que vendiera el Barcelona estaría en precio de mercado y que por tanto sería una venta económicamente muy atractiva. Igual que creo que el coste del delantero que llegará también lo sería a precio de mercado. Nada barato y con un esfuerzo económico también importante.

¿ Que decisión tomar ante este dilema? Yo lo tengo claro. La historia ha demostrado que las grandes inversiones económicas realizadas en los últimos tiempos por el Barcelona, salvo honrosas excepciones, no han resultado ni han compensado al enorme esfuerzo que tuvo que hacer la entidad. Las locuras pagadas por Dembélé, Coutinho o Griezmann fueron un derroche total.

Más vale malo o regular conocido que bueno por conocer. Ya sabemos que estos jóvenes valores del actual Barcelona han respondido perfectamente a las expectativas de lo que se les pedía en los últimos tiempos y tienen una gran proyección deportiva. ¿Por qué desprenderse de ellos? ¿Qué sentido tiene o que beneficio garantiza? El debate se producirá. ¿Vender bien para comprar bien? Ya veremos qué pesa más.