Valverde debe soñar con Neymar

Hay jugadores que pueden marcar a un entrenador. Y, curiosamente, la etapa de Ernesto Valverde en el Barça siempre estará íntimamente vinculada a Neymar. El técnico llegó como revulsivo en el 2017, pero el brasileño hizo saltar por los aires todo su primer proyecto. Con sigilo pactó su fichaje con el PSG y dejó huérfano a un equipo que comenzó el curso con el pie cambiado.

En el recuerdo queda aquella triste Supercopa en la que el Madrid pasó por encima a un Barça muy tocado por la fuga del futbolista. Valverde aprobó los fichajes de Dembélé y Coutinho para suplirle, pero nunca fue lo mismo y a este Barça le ha faltado magia ofensiva en muchos momentos. Dos veranos después, el nombre de Neymar vuelve a cruzarse en el camino de Valverde.

Con la planificación también casi cerrada, el club no quiere renunciar a la posibilidad de un regreso por la puerta grande. Y es evidente que Valverde tendrá que lidiar, si eso sucede, con un ataque descomunal. Bendito dolor de cabeza en un año en el que ya no habrá excusas.