Valverde y los errores

Ernesto Valverde, en la sesión previa al partido ante el Espanyol

Ernesto Valverde, en la sesión previa al partido ante el Espanyol / Javi Ferrándiz

Xavier Ortuño

Xavier Ortuño

A Ernesto Valverde no le cuesta reconocer que ha errado un planteamiento y sin miedo a que quede como exponer públicamente un fallo, prefiere solucionarlo a intentar taparlo y que eso pueda perjudicar al equipo.

Ante el Alavés, el equipo se desmontaba y sufría con la falta de solidez defensiva. Digne y Semedo no estaban teniendo su mejor partido y los carriles del equipo eran vía libre para que el equipo de Abelardo ganara terreno a los blaugrana. 

A los siete minutos de la segunda mitad, llamó a dos de los jugadores que calentaban en la banda: Sergi Roberto y Jordi Alba, los supuestos titulares en los laterales. Y aunque nos pese ver en esa posición al de Reus, ha quedado claro que no hay otro como él en ese lugar del campo. 

Valverde ha detectado donde estaba el problema y lo ha encarado moviendo las piezas que hacían falta para cambiarle la cara a un partido que iba camino de consagrar al Alavés como un especialista en el Camp Nou, ya se llevó los tres puntos la temporada pasada, y finalmente, gracias al dúo de la victoria blaugrana: Suárez y Messi se le dio la vuelta al partido.

Otros entrenadores habría hecho mil filigranas para no dejar al descubierto un error de planteamiento suyo, por suerte Ernesto sigue sumido en una normalidad, tanto en la victoria como en la derrota (solo una), en la que no quiere medallas ni en los éxitos ni se arruga a la hora de cambiar un planteamiento.