La única solución es ser transparente en las comisiones de los traspasos

André Cury es el responsable de estudiar el mercado brasileño para el Barça

André Cury es el responsable de estudiar el mercado brasileño para el Barça / EFE

Ernest Folch

Ernest Folch

El Barça negó ayer rotundamente que André Cury, su hombre en Brasil, cobrara 6,6 millones de euros por la venta de Neymar al PSG, tal como explicó el programa ‘Què t’hi jugues?’ de la Cadena SER. La información causó inicialmente una gran conmoción porque habría sido imposible de entender que un “trabajador del club”, tal como se le ha calificado alguna vez desde el Barça, cobrara por traspasar una de sus grandes estrellas a un rival.

André Cury negó a SPORT haber cobrado ni un solo euro por esta operación y el club lo desmintió rápidamente. Sin embargo, han quedado en el aire algunas dudas. La primera tiene que ver con la propia noticia: si el club está seguro de que no hubo ningún pago no solo debe decir, como ha dicho, que “se reserva el derecho a emprender acciones legales” sino que debería emprenderlas ya sin más dilación: si algo es mentira, es mentira siempre, no hay que darle más vueltas. La segunda tiene que ver con la relación del Barça con Cury. Ayer se dijo que tiene una relación “contractual” con el club, pero antes del verano Bartomeu le dijo a Jordi Basté en RAC1 que Cury es una persona que trabaja en el staff técnico del club: quizás debería aclararse con más exactitud esta vinculación para evitar malentendidos. Y el tercer punto, el fundamental, tiene que ver con las comisiones. Cury ayuda al Barça a contratar futbolistas que juegan en Brasil gracias a sus contactos y a su privilegiada posición en el mercado.

Es lícito que cobre por su trabajo y que su remuneración dependa de comisiones: por sí mismas no son ni ilegales ni amorales, pero hay que explicarlas. En el mundo del fútbol, no solo en el Barça, existe una confusión deliberada sobre las comisiones que cobran los intermediarios en los traspasos de jugadores. Una vez el Barça ha dejado claro que no pagó 6 millones de euros para que el PSG le robara a 

Neymar, sería bueno, para evitar nuevos sobresaltos en el futuro, que fuera claro y transparente en esta cuestión. Es la única solución para 

evitar más escándalos.