Una eliminación que fue injusta

Partido de intensidad máxima con una gran presión sobre el poseedor del balón que obligaba a jugar rápido y provocaba un ritmo frenético en el juego. Empezó bien el Barça que forzó dos ocasiones de gol en los pies de Ansu Fati, que fueron prácticamente las únicas del equipo azulgrana en estos primeros cuarenta y cinco minutos.

El Athletic presionó muy bien arriba impidiendo la salida del balón y provocando que Ter Stegen se viese obligado a buscar el pase largo en muchas ocasiones y hasta cometer tres errores. El Barça se hizo con el balón en largas posesiones pero sin amenaza de peligro hasta que llegaba a los pies de Messi y podía conducir velozmente hacia la portería de Simón.

Buena actitud en general del equipo muy enchufado y en especial de Leo que ejerció de líder de sus compañeros.  El Barça con Sergi Roberto de extremo en ataque en un 4-3-3, que se convertía en 4-5-1 en defensa con Messi de falso 9. En ataque no habían referencias arriba, molestaban, debían llegar, pero daba la sensación de no temer demasiadas ocasiones de gol.

Más ocasiones

Mandó más el Barça en la segunda mitad que tuvo las dos mejores ocasiones en los pies de Griezmann y Messi que sacó con los pies Simón. Fueron los mejores minutos del barça con un De Jong más llegador y con Griezmann más cercano a la finalización.

Pero surgió lo imprevisto con la peinada de Williams que dejó fuera al Barça en el último suspiro como hizo Aduriz en el partido de Liga. Eliminación muy injusta, pues el Barça fue mejor y tuvo más ocasiones para pasar pero no se les puede recriminar nada a los azulgrana, si acaso la falta de acierto en el remate. Su actitud y lucha mereció más.