Triunfo balsámico y subidón con Ansu

Por fin el Barça pudo disfrutar de un partido relativamente cómodo. Una victoria balsámica que, además, se coronó con un broche de oro tras el esperado retorno a lo grande de Ansu. Empecemos por destacar una pequeña novedad en el planteamiento del equipo. El Barça exhibió una enorme movilidad en el centro del campo, con intercambio constante de posiciones. Los Gavi, Nico, Coutinho, e incluso Busquets, se alternaron y dificultaron enormemente las marcas de un modesto Levante. Otro dato importante, aunque en este caso es achacable en buena medida a la figura de Gavi, es la mayor verticalidad en el juego colectivo. El canterano se hartó de buscar espacios y desmarques de ruptura de los compañeros. El único pero fue el bajo acierto de porcentaje en el remate. Se dejaron escapar muchas opciones de gol. 

LA GRAN VUELTA DE ANSU

No hay que perder de vista el valor real de la victoria ante el Levante. Hoy por hoy no es una referencia válida de cara a los grandes duelos que están por llegar en cuestión de días: Benfica, en Champions, y Atlético, en el próximo compromiso liguero. Por supuesto, el choque de ayer está marcado por la presencia de Ansu en el último cuarto de hora. Pocos minutos, pero muy bien aprovechados. Entró en juego de forma constante y se le vio confiado y atrevido con el balón en los pies. Ahora habrá que darle continuidad a estos minutos, pero se requiere paciencia y precaución antes de afrontar un partido entero. Cuidado con elevar en exceso las expectativas del jugador en estos primeros enfrentamientos. Es necesario ver cómo Ansu encaja los esfuerzos y las cargas tras cada partido.

La clave: triunfo vital para calmar ánimos y seguir soñando con el brutal regreso del ‘10’.