Todos hablan con todos y nadie pacta con nadie

Aplaudo muy sinceramente las acertadas palabras que ayer pronunciaron tanto el nuevo presidente de la Comisión Gestora del FC Barcelona, Carles Tusquets, como el Síndic del Soci, Joan Manuel Trayter. 

El primero, sin grandilocuencias, lo dijo ‘ras i curt’. No aceptará presiones de nadie para fijar la fecha de las elecciones, que es por lo que pagarían ahora mismo todos los precandidatos. Y así debe ser porque Tusquets tiene que pensar en qué es lo mejor para el Barça y su masa social, no para los precandidatos a la presidencia a título individual.

Para algunos de ellos, convocarlas lo más pronto posible, digamos que en diciembre, sería lo más conveniente, porque la premura de tiempo descartaría a aquellos precandidatos que, pensando que las eleccione serían en marzo, todavía no tienen armada la infraestructura necesaria ni los equipos de trabajo para encarar ese mayúsculo reto. Y ya se sabe, cuantos menos obstáculos haya por el camino, mucho mejor.

Igualmente celebro lo que dijo el Síndic del Soci, Trayter, que pidió al entorno que le dejara trabajar con tranquilidad.  No fueron palabras vanas ni futiles, porque él, como viejo sabio en estas lides, sabe a la perfección que los precandidatos seguirán intentando ganar cuotas de protagonismo, aunque sea a costa de tener que poner en tela de juicio las decisiones tomadas por la Gestora.

Y es en este punto donde me gustaría hacer una reflexión. No sé si alguno de los pilotos que está en la parrilla de salida tiene mucha o poca prisa por llegar al referéndum. Lo que sí sé es que mientras sean precandidatos y no hayan obtenido el bautismo de las firmas (2.257 a dia de hoy), tienen la misma legitimidad para pedir y exigir que mi vecino, que también es socio.

No seré yo quien tire piedras sobre mi propio tejado, pero analizando lo que viene sucediendo, creo que, en general, los precandidatos están teniendo un protagonismo que no les corresponde. Soy de la idea que esa enorme atención mediática se debería dejar, como dije antes, para cuando todos tengan bajo el brazo las firmas necesarias, porque a muchos de ellos, con perdón, les estamos haciendo la campaña electoral gratis. Sí, porque sin desvelar contenidos, programas, juntas directivas, entrenadores (salvo uno), secretarios técnicos ni fichajes, se han convertido en los grandes ‘agitadores’ del entorno culé.

Mientras tanto, haciendo mio un viejo proverbio turco, está permitido ir de la mano del Diablo hasta haber cruzado el puente, de ahí que prácticamente todos los aspirantes a la presidencia hayan hablado entre ellos para estudiar posibles alianzas en caso de ser necesarias. Legítimo, noble, muy barcelonista pero, a la hora de la verdad, salvo uno o dos, todos quieren ir solos y liderando su propio proyecto. 

Retomando el hilo de lo que dijeron ayer Tusquets y Trayter, pidamos a los precandidatos paciencia. No deben poner sus intereses particulares por delante de los de un club que, por muy diferentes razones, ha sufrido un enorme desgaste en los últimos tiempos. Un poco de sosiego no le vendría nada mal.