The Best, un insulto al fútbol

Messi es el mejor futbolista de la historia. A partir de esta premisa, cualquier discusión sobre cualquier premio individual que se haya dado en el pasado o que se tenga que dar en el futuro se queda sin contenido. El crack blaugrana merecería ganarlos todos. Absolutamente todos. Pero está claro que los intereses económicos (de la UEFA, de la FIFA, de los patrocinadores e, incluso, de los medios de comunicación) son incompatibles con la hegemonía del argentino. Así, pues, hay que repartir los galardones para que el negocio siga funcionando... 

Solo de esta forma se puede entender que Cristiano Ronaldo tenga cinco Balones de Oro. ¡Los mismos que Messi! Un empate surrealista que no tiene nada que ver con la realidad. ¿De verdad alguien, en su sano juicio, puede pensar que Cristiano está a la altura de Messi? Lo he dicho (y escrito) varias veces. Pero insisto: Messi está en el Olimpo de los Dioses, al lado de Di Stéfano, Pelé, Cruyff y Maradona. Pongan ustedes, si quieren, el orden. Yo lo tengo claro... Por supuesto que Cristiano no puede equipararse a ninguno de ellos. No les llega ni a la suela de los zapatos. El portugués es una bestia competitiva. Un atleta monstruoso. Un goleador terrorífico. Pero no ha marcado la historia del fútbol como lo han hecho estos cinco magníficos...

Por eso resulta todavía más insultante comprobar que Messi no está, ni siquiera, entre los tres finalistas del The Best 2018 Los ‘elegidos’ son Cristiano, Modric y Mo Salah... Entiendo que el Mundial (donde Argentina fracasó, lo mismo que Portugal por cierto) y la Champions le han penalizado. Pero ha ganado un doblete (Liga y Copa) y ha sido Bota de Oro (34 goles). ¿Eso no es suficiente para estar en el podio? Por no hablar de la magia que regala semana a semana en todos los campos... Pero, claro. Messi ya está muy visto. Hay que promocionar a otros. Aunque ni siquiera eso saben hacer bien: No ponen a Mbappé o Griezmann (campeones del mundo con Francia) entre los tres finalistas. Incomprensible. Inexplicable. Por no decir algo peor...