Tambores para el antixavismo

Xavi ha logrado dar mucha consistencia y empaque al Barça en Liga

Xavi ha logrado dar mucha consistencia y empaque al Barça en Liga / EFE

David Bernabeu

David Bernabeu

Crece el Barça de Xavi. A fuego lento. Pero agita su progresión ante la atónita mirada del antixavismo y de los detractores del técnico en el entorno del club. Ayer, ninguno de ellos pudo reivindicar la recurrente figura de Koeman, algo de lo que Ronald no tiene la culpa pero que se produce de forma cansina cuando el equipo se tambalea. A estas alturas, los números ya no aguantan ni la broma. Tampoco el fútbol, a pesar del sufrimiento en el Metropolitano, el sesteo ante el Espanyol o las concesiones al Intercity.

Hernández lleva más de trece meses instalado en el cargo. En ese periplo, ha cedido sólo cuatro derrotas en la Liga y tras 16 jornadas, tiene los mismos dígitos que Pep Guardiola en su debut. Palabras mayores. Además, es mejor que Luís Enrique en sus dos primeros años y que Valverde, en su estreno. Todos ellos tuvieron a Messi. Koeman, también. Xavi, no. El Barça bordó los mejores 25 minutos de fútbol en casa del Atleti en mucho tiempo.

Presionó alto, lleno de energía, desarboló a su rival con superioridades por dentro y les remató con un Pedri antológico. Luego, perdió el control. No encontró nunca el hombre libre ante el paso adelante del Cholo y sí, le pudieron empatar. Pero el equipo incorporó algo que había perdido en el arranque del año: hambre por ganar, competitividad y nivel defensivo. Con el cuadrado, Xavi debe aspirar a dominar el juego más tiempo, pero cuando eso no sucede es necesario saber competir para contrarrestar la adversidad. Sin ese registro, tampoco habrá opción de acercarse a la élite.

Tras derrumbarse en el clásico y anunciarse el hundimiento, el Barça ha clavado 19 de 21 puntos. Y le saca tres a ese Madrid de época (?). Aún no anda redondo, le queda mucho trabajo de campo y perfilarse con mayor autoridad en las grandes citas. Pero tiene una ocasión de oro en Ryad. Suenan tambores de guerra para el antixavismo.