La táctica en Anfield: atacar, atacar y atacar

No hay partido fácil en Anfield, ni mucho menos en una señora semifinal de Champions

Valverde hará rotaciones en Vigo

Valverde hará rotaciones en Vigo / EFE

Ernest Folch

Ernest Folch

No hay partido fácil en Anfield, ni mucho menos en una señora semifinal de Champions. La nefasta experiencia de Roma, convertida en el Pepito grillo de toda la temporada, debe bastar para ahuyentar cualquier tipo de confianza. Ahora bien: por mucho que los blaugrana hagan justificadas curas de humildad, es inevitable que el Barça sea hoy el gran favorito para pasar a la final, y más después de que Firmino y Salah hayan quedado descartados.

Y es que todo lo que le conviene al Liverpool es exactamente lo que debe evitar el Barça. Klopp quiere locura, vértigo y velocidad, mientras Valverde necesita calma, cerebro y templanza. Ahora bien: el Barça no puede confundir serenidad con pasividad o frialdad con conservadurismo. Porque el ADN del equipo, a pesar de todas las evoluciones, es atacante. Y ahora es cuando más hay que recordar que el Barça, también el de Valverde, sufre cuando no ataca o no tiene el balón, como se vio en el Camp Nou. Hoy más que nunca el Barça debe salir al ataque, entre otras cosas porque le basta un gol para dinamitar la eliminatoria: con un tanto el Liverpool tendría que meter cinco, un escenario que entraría ya dentro de la paranormalidad. El propio Valverde fue ayer más claro que nunca: “Lo que hay que hacer es atacar”.

El partido de ida generó algún debate ilustrado sobre el estilo del juego, en otra de esas disonancias que se producen entre la clase periodística en Twitter y la realidad de la calle. Pero seguro que entre los barcelonistas eufóricos y los quejicas hay un punto de consenso: el Barça es un equipo diseñado para atacar, y en lo único en lo que es un equipo vulgar es cuando intenta solamente defender. Se le pueden dar todas las vueltas que queramos, pero el Barça está a un pequeñísimo paso de la final soñada de Champions. Y solo un camino lleva a Madrid: atacar, atacar y atacar.