El suplente de Yerry Mina, antes que la cantera

Jeison Murillo coincidió con Yerry Mina en el Camp Nou

Jeison Murillo coincidió con Yerry Mina en el Camp Nou / Instagram

Ernest Folch

Ernest Folch

El Barça cerró ayer la cesión de Jeison Murillo, tras confirmarse que el Chelsea no rebajaba sus pretensiones por Christensen, este sí, un central consagrado. Murillo llega como última opción, tras la imposibilidad de llegar a un acuerdo por otros jugadores, y ciertamente no es lo mismo el colombiano que el danés: Christensen era una apuesta por un jugador contrastado y de primer nivel, Murillo es un parche, pedido por el entrenador, contratado para compensar circunstancialmente la hemorragia de lesiones en la demarcación de central. Murillo es central de un club competitivo como el Valencia, es internacional y los expertos le atribuyen cualidades físicas de primer nivel. El fútbol es un misterio, y puede hacer posible incluso que un jugador que ha pasado sin pena ni gloria por el Valencia acabe triunfando en el Barça. Sin embargo, la carta de presentación de Murillo es cruel: es suplente del Valencia y de Yerry Mina en la selección colombiana. A priori es irónico que el entrenador blaugrana, que no creyó nunca en Yerry, crea ahora en su suplente.

El principal problema del fichaje de Murillo es que no se sabe en qué puede mejorar lo que el Barça tiene en casa con Chumi o Cuenca, por citar solo dos opciones de la cantera. Vuelve a dar la sensación que para el entrenador del Barça cualquier opción pasa por delante de la cantera. A Aleñá, por ejemplo, ni siquiera un gol y un par de buenas actuaciones le han valido para jugar unos minutos cuando el equipo va ganando 0 a 4. Valverde, que ha demostrado ser un entrenador con muchas virtudes y que prepara muy bien los partidos, ha dejado sin embargo muy claro que la cuestión de la cantera es un asunto que no va con él, a pesar de que esta era una de sus grandes bazas cuando se le fichó. Quizás porque la cantera tiene que ver con el medio y largo plazo y ahora mismo solo está pendiente del siguiente partido. Lo chocante es que nadie sea capaz de hacerle ver que el mensaje que se lanza dentro del club y dentro de La Masia con fichajes como el de Murillo es devastador. Por cierto, hace solo tres días el exblaugrana Eric García debutaba en el primer equipo del Manchester City en la posición de central. Valdría la pena que el Barça parara un momento a reflexionar sobre sus prioridades a largo plazo.