Será un Valencia intenso y aguerrido

Bordalás espera acabar con su mala racha en el Camp Nou

Bordalás espera acabar con su mala racha en el Camp Nou / AFP

Pichi Alonso

Pichi Alonso

Este Valencia no se asemeja en nada a los equipos anteriores de Bordalás. Por lo menos, los números así lo indican, pues sorprendentemente ha encajado 38 goles y solo el Alavés y el Levante le superan en ese apartado, cuando de todos es conocido que la verdadera fuerza de sus equipos era la fortaleza defensiva.

También sorprende que en la faceta goleadora esté tan bien posicionado el conjunto de Bordalás, que es ni más ni menos el sexto equipo que más goles consigue, y no aquellas cifras exiguas a las que se le tenía que sacar mucha rentabilidad, a base de encajar muy pocos goles. Está claro con estos datos que el técnico alicantino está viviendo una metamorfosis en el Valencia.

En solo dos partidos, separados por tres días el uno del otro, hemos visto la cara y la cruz de su equipo; en Copa, en San Mamés ante el Athletic, vimos el Valencia que esperábamos ver desde que se conoció que Bordalás sería su técnico. Un equipo aguerrido, intenso, presionante, disputando a muerte cada balón dividido, con constantes interrupciones tácticas...

En cambio, tres días después, ante un Alavés moribundo, se presentó un Valencia tierno, condescendiente, contemplativo, que recibió menos amonestaciones que el equipo rival y fruto de ello, Bordalás se vio obligado a realizar tres cambios en el descanso. Ante el Barça no habrá dudas del Valencia que vamos a ver: será la versión de San Mamés.

No llega ni mucho menos en su mejor momento el Valencia que después de su victoria en el campo del Levante, lleva seis partidos consecutivos sin conocer la victoria, y que ha provocado que de estar a un punto de las plazas europeas, se haya distanciado hasta los ocho puntos. 4-4-2 con dudas Mamardashvili parece haberle ganado la partida a Jaume tras la lesión de Cillessen, con Foulquier -todo fuerza y pundonor- por derecha y Gayà por izquierda -un dolor de muelas en cada partido frente al Barça- con mucho recorrido y peligro cuando se incorpora y también con capacidad para defender correctamente. Diakhaby y Alderete son los centrales, con mucha experiencia y contundencia el paraguayo y buena progresión el francés, que ya no comete aquellos errores infantiles

Guillamón se ha convertido en imprescindible en el pivote defensivo, tiene criterio para jugar el balón y tácticamente mantiene la posición. Carlos Soler a su lado, con el constante debate de si rinde mejor en el centro o en la banda, tiene calidad para filtrar pases, le da sentido al juego, llega muy bien a la finalización, goza de un buen disparo y es el especialista a balón parado.

Veremos si sigue contando como desde su llegada con Ilaix de titular, pues no creo que modifique el dibujo, salvo que haga caer a la banda a Soler, dejando a Ilaix en el doble pivote. En la banda izquierda hay propietario en Bryan Gil. Es un jugador diferencial por el desequilibrio que genera en el uno contra uno. Aporta velocidad, profundidad y sobre todo mucho dinamismo. 

Arriba, Hugo Duro, al que se le está sacando mucho rendimiento, tanto en banda, como cuando juega como delantero. También Guedes se ha reivindicado y vuelve a parecerse al mejor Guedes del principio, jugando con mayor libertad como delantero, pues cuando partía de la banda en defensa debía trabajar y desgastarse más.