¿Quién será el nuevo líder del Barça?

Memphis Depay cuajó otro gran partido ante el Getafe

Memphis Depay cuajó otro gran partido ante el Getafe / EFE

Ernest Folch

Ernest Folch

Con la marcha de Messi no solo se fue el mejor jugador y el mejor goleador, sino sobre todo el líder y la cara visible de toda la institución. El liderazgo particular de Messi era un espejo de su personalidad: silencioso y discreto, ganado únicamente por meritocracia en el terreno de juego. Para ejercerlo no hacían falta grandes aspavientos ni aparecer en ningún Twitch: si Messi tenía autoridad era por lo que había ganado, y punto. Treinta días exactos después del adiós de Messi, el Barça está a la espera de que emerja un nuevo líder, que sea el referente del club. El primer candidato es por supuesto Joan Laporta, que tiene a su favor su indiscutible personalidad y haber sido votado masivamente por los socios.

Pero tiene varios hándicaps. No mete goles, ha heredado un club arruinado, que limita claramente su margen de maniobra, y en sus primeros meses ha tenido que desmentirse a sí mismo demasiadas veces: se ha ido Messi a pesar de que en campaña se presentó como el único que podía garantizar su continuidad, ha mantenido a Koeman a pesar de que no creía en él, y ha tenido que quedarse a Umtiti a pesar de que prometía una revolución. En el vestuario, la hiperactividad de Piqué pueden convertirlo, a corto plazo, en la cara más visible del club, como demuestran sus apariciones desinhibidas (y siempre interesantes) de estas últimas semanas. El problema de Piqué es que por su perfil inquieto y poco prudente es fácil que termine resbalando, como le ha sucedido esta semana con sus actividades acuáticas en Cantabria: el barcelonismo se debate siempre entre la brillantez de su oratoria y el ruido a veces excesivo que genera a su alrededor.

El tercer candidato a liderar el club es Koeman, avalado por su enorme personalidad, que le valió ser el único referente del club cuando este se hundía en plena crisis institucional, económica y pandémica. Sin embargo, los vaivenes de Laporta con su renovación, lo han erosionado inevitablemente. Queda una última posibilidad: que surja, dentro del campo, un líder natural, ganado en el césped. La personalidad de Memphis, el carisma de Ansu o alguien que todavía no sabemos quién es, podrían ocupar, con tiempo, paciencia y títulos, una parte del enorme vacío que ha dejado Messi. Porque se hacían muchas teorías sobre la manera cómo ejercía su liderazgo pero un mes después de su marcha, las paredes del club resuenan como un piso sin muebles.

Laporta se sincera con Griezmann

Laporta hizo el pasado lunes en TV3 algo poco habitual en este mundo al hablar de la salida de Griezmann: fue sincero y explicó la verdad. Su frase no puede ser más contundente: “No era el jugador que necesitábamos”. Ni buscó excusas ni se escudó solamente en su sueldo alto. Laporta explicó lo que todos llevábamos tiempo comprobando: que el francés, a pesar de ser una estrella mundial, nunca se adaptó a la manera de jugar del Barça. Cuando se cuenta la verdad, incluso cuando duele, todo se entiende mejor.

Ajuste de cuentas de Piqué con Pep

En su jugosa aparición en ‘La Sotana’, Gerard Piqué dijo muchas cosas interesantes. Pero alguna también inoportuna, como esta reflexión sobre el último año de Guardiola: “Fue el único momento en el que me he planteado salir del Barça”, para añadir que la relación con su entrenador “cambió” cuando empezó con Shakira. ¿De verdad era necesario ajustar cuentas en público y sacar ahora trapos sucios del pasado? Estaremos atentos a la respuesta (o no respuesta) de Guardiola.