La segunda era Laporta empieza mal

Laporta explica los motivos de la salida de Messi

Laporta explica los motivos de la salida de Messi / AFP

Toni Frieros

Toni Frieros

Es evidente que el mandato de Joan Laporta no ha comenzado con buen pie. Bueno, miento. Nada más llegar pudo hacerse la foto con la Champions League femenina, la Copa de Europa del balonmano, la Liga de fútbol sala, la Copa del Rey del primer equipo de fútbol... si bien esos éxitos fueron mérito de la anterior junta directiva. Básicamente, los socios del FC Barcelona votaron a Joan Laporta para que devuelva el esplendor al club... y para que atara la continuidad de Leo Messi. Ya se verá si finalmente logrará lo primero. Lo segundo, no. Y claro, la afición está que trina porque se siente engañada.  

Ya somos todos maduros y justificar la salida de Messi poniendo a los pies de los caballos a la junta de Bartomeu es una pobre excusa, por muy mal que lo hubiera hecho el anterior presidente. Lo que el socio le pidió en las urnas a Laporta fueron soluciones inmediatas, ideas claras, acciones contundentes, un plan de rescate planificado... no que echara las culpas a quienes ya no están. 

Eso no estaba en su programa electoral. Personalmente, y hasta el día de hoy después de cinco meses de mandato, me está decepcionando el devenir de su gestión. La salida de Jaume Giró, la consecución del aval sobre la campana, la modificación del código ético para contratar familiares, el parón del Espai Barça, el trato dado a Koeman, la falta de comunicación clara y transparente, la depuración de todo el área ejecutiva de Bartomeu (¡más de 25 despedidos!), endeudarse en 500 millones de euros más con Goldman Sachs y, obviamente, el triste final de Messi.

Recuerdo que Laporta se enfadó muchísimo cuando se suspendieron las elecciones en enero y se pasaron al 7 de marzo debido a la pandemia: “Cada día que pasa sin que haya un presidente corremos más riesgo de perder a Messi”, dijo entonces el candidato, sin saber que Messi ya le había dicho a su mujer y a sus hijos en diciembre que se quedarían en el Barça.Es curioso que el candidato que más y mejor relación tenía con Leo, toda una garantía de éxito, haya terminado viviendo una despedida tirante con Messi y su padre. En septiembre conoceremos el informe de las diferentes auditorias, en octubre habrá otra asamblea y en noviembre habrá que renovar los avales. Y no olvidemos que Laporta quiere modificar los estatutos. Ya hablaremos de eso. Se avecinan tiempos difíciles y más que nunca es obligado actuar con rigor, talento y sabiduría. El FC Barcelona, su historia, lo merece.