No seamos idiotas

La afición del Atlético se desplazó masivamente a Liverpool y disfrutó de la clasificación

La afición del Atlético se desplazó masivamente a Liverpool y disfrutó de la clasificación / EFE

Guillem Balagué

Guillem Balagué

Cuando Thomas Tuchel, el entrenador del PSG, elogió a su afición por haberse juntado en los alrededores de un estadio que por dentro quedó vacío, lo hizo porque poco podía hacer ante lo ocurrido. Pero se olvidó que, como dijo Jorge Valdano, el fútbol es lo más importante entre las cosas menos importantes. Debería haber ido acompañado de una advertencia: sois unos idiotas si repétis el gesto. Un poco como lo que dijo Jurgen Klopp a un par de hinchas del Liverpool que soltaron su mano para que los jugadores se la chocaran a la salida del túnel: “Guardaos la palma, idiotas”. Y sí, los aficionados del Atlético que viajaron a Liverpool son unos irresponsables. No lo digo yo, lo dijo el gobierno español.

Ante la presencia masiva de aficionados procedentes de un foco muy activo del virus, el Liverpool pudo hacer poco. “Sólo somos un club de fútbol”, me contaron. “Dependemos de lo que nos digan las autoridades sanitarias”. Y nadie sugirió cerrar el estadio. El Reino Unido está unos 14 días detrás de Italia en la expansión del virus, pero su reacción a la pandemia se ha basado hasta ahora en una estrategia diferente al resto.

Esta misma semana la máxima asesora científica del gobierno dijo que era peor que la gente viera los partidos en el pub que en un estadio de 70.000 personas. Puede ser, pero eso no elimina el peligro de grandes aglomeraciones. Se ha tomado el camino más cauto. Es una política basada en regular el comportamiento de la masa para retrasar y reducir al máximo el impacto. Sin saber si va a tener éxito o no, sin seguir pautas que han marcado otros países. A su manera. 

La falta de liderazgo de UEFA

Hasta ayer, la UEFA quería preguntar a las ciudades que hospedan la Eurocopa si tenían suficiente apoyo sanitario... sabiendo que la respuesta sería negativa y que podría justificarse así la cancelación. En una situación como la actual se necesita la valentía mostrada por el Getafe.

¿A quién se le pasa la factura?

Se ha calculado que los clubs de nuestra liga podrían perder un quinto de sus ingresos. Pongamos que eso es así: ¿aceptarían los jugadores y entrenadores reducir su sueldo el mismo porcentaje? En el fútbol, ¿quién debe pagar por la pandemia?