Saber vender en el momento oportuno

Verano a verano, la actual dirección deportiva se ha especializado en salidas masivas de jugadores, algo que hacía años que no sucedía en el Barça. O no tanto como era lo deseable. La exigencia de un rendimiento inmediato ha hecho que muchos futbolistas tuviesen un paso fugaz con la premisa que siempre es mejor vender en el momento oportuno antes de que la situación se enquiste. El Barça ha conseguido sacar réditos económicos importantes de situaciones casi perdidas y existe la convicción de es el único camino a seguir. Salvo las vacas sagradas, todo está en venta y en los meses sucesivos se seguirá forzando la máquina. 

Por eso, no sería nada extraño que el club diese un paso más hacia adelante intentando colocar a los futbolistas que tienen y tendrán menos minutos. Caiga quien caiga para evitar tensiones internas y gestionar de la mejor manera los fines de ciclo que algunos futbolistas desearían eternizar. Sin duda, el ejemplo más claro es el de Rakitic, que no quiso marcharse al PSG hace dos años y que, ahora, comienza a tener claro que puede tener una salida por la puerta de atrás. 

Hay futbolistas que deben venderse en el momento oportuno. Por edad, por rendimiento ya exprimido y por la capacidad para generar ingresos. La plantilla del Barça es una de las más completas del mundo y el margen para acortarla es tremendo. El camino pasa por dejar fichas libres para que los chicos de abajo tengan oportunidades. Es ley de vida y en enero seguro que pasarán cosas. Por ahora, lo que queda claro es que La Masía sí ha respondido al reto.