El ruin chantaje del Atlético al Barça

Abrazo entre Griezmann y Simeone tras la victoria 'in extremis' ante el Porto

Abrazo entre Griezmann y Simeone tras la victoria 'in extremis' ante el Porto / EFE

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Griezmann ha jugado esta temporada los seis partidos oficiales que ha disputado el Atlético. Pero en todos (cinco de Liga y una de Champions) ha salido en el minuto 63. ¿Casualidad? Por supuesto que no. El club rojiblanco, con la connivencia de Simeone y el beneplácito del propio futbolista, está chantajeando al Barça con esta argucia. Pretende librarse de abonar los 40 millones de euros que se acordaron como traspaso, una vez finalizada la cesión. El Atlético se agarra a una cláusula según la cual no pagará al Barça si Griezmann juega menos del 50 por ciento de los minutos. El club blaugrana ha respondido a la trampa de Gil Marín y Cerezo con una demanda en la que especifica que esa cláusula solo era válida el primer año de la cesión, no en la prórroga de la segunda. Y que en su primera campaña, el galo ya jugó el 80 por ciento de los minutos, por lo que existe la obligatoriedad de abonar esos 40 millones.

Pero consideraciones legales aparte, la actitud del Atlético es despreciable. Una burda manipulación para hacer daño al Barça, aunque sea a costa del ridículo del entrenador (siempre pendiente del cronómetro para saber cuándo puede salir al campo el delantero francés) y del perjuicio deportivo del futbolista, poniendo en peligro su participación en el Mundial de Qatar. Sorprende, además, este comportamiento actitud ruin del club rojiblanco teniendo en cuenta los ‘favores’ que le ha hecho el Barça en los últimos tiempos: pagarle, primero, 135 millones por el fichaje de Griezmann (120 de la cláusula de rescisión más 15 de ‘penalización’) y regalarle, después, a Luis Suárez. Menudo agradecimiento...

Está claro que el Atlético está jugando con fuego. Y acabará quemándose. Porque la razón jurídica está al lado del Barça. Y la moral, por supuesto, también. No hay precedentes en la historia reciente del fútbol de una actitud tan reprobable como la del club rojiblanco. Y, menos aún, con una estrella del calibre de Griezmann, uno de los futbolistas mejor pagados del planeta (20 millones de euros brutos esta temporada y 38 la siguiente, la última de su contrato con el Barça) y campeón del mundo con Francia en 2018. El menosprecio que está demostrando el Atlético a cualquier tipo de ética resulta tremendamente sorprendente. Y, por supuesto, no puede salirle gratis. El Barça irá a por todas. Y el peso de la ley deberá caer sobre el club rojiblanco. O, al menos, eso es lo que espero... Porque las trampas y las injusticias no pueden quedar impunes.