Otro revés de un Barça sin recursos ofensivos

Dembélé en el Barça - Betis

Dembélé en el Barça - Betis / FC Barcelona

Pichi Alonso

Pichi Alonso

Paso atrás de un Barça que lejos de crecer en su juego ayer menguó en sus aspiraciones. Y eso que el duelo frente al Betis no arrancó mal: inicio ofensivo, circulación rápida de balón y un Coutinho activo en los metros finales. Detalles positivos que no fueron más allá del primer cuarto de hora.

A partir de ese momento, el reclamo del balón al pie, los pases en horizontal y la ausencia de profundidad se apoderaron de un equipo que echó de menos el balón a los espacios, donde la falta de movilidad y la ausencia de intercambio de posiciones pasaron factura.

La segunda línea tampoco aportó nada reseñable en su juego. Los interiores estuvieron muy planos en sus prestaciones, no se constataron desmarques de ruptura y el disparo exterior brilló por su ausencia. En resumen, nadie inquietó el marco de Rui Silva.

Desorganización y derrota

El gol anulado a Juanmi fue el presagio de lo que estaba por llegar. Antes, pequeños fogonazos con la entrada de Frenkie y, en especial, de Dembélé, que aportaron ritmo y velocidad. El francés, junto a Araujo, Alba y pequeños detalles de Abde fueron de lo poco destacado en el Barça de Xavi.

La puntilla llegó en una contra mal defendida -con error final de un Dest que fue en ayuda de Lenglet dejando libre de marca a Juanmi-. Al margen de la derrota futbolística y su trascendencia en una clasificación cada vez más preocupante, lo peor de todo es recuperar cierta sensación de impotencia sobre el terreno de juego.

El equipo adoleció de esos recursos para desbordar y generar como mínimo las ocasiones de peligro que invitan a soñar con recuperar las victorias. Frente al Betis, un mazazo en toda regla al espíritu de recuperación.