Renovar a Messi, la primera misión del nuevo presidente

Messi, antes del Gamper

Messi, antes del Gamper / AFP

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Durante las últimas semanas hemos hablado, y mucho, de Messi por su polémico intento (afortunadamente frustrado) de irse del Barça. Han sido momentos de gran tensión para todos los culés. Pero también para el crack argentino, que ha sufrido personalmente como nunca lo había hecho desde su llegada al Camp Nou hace ya veinte años. Por suerte, Messi seguirá en el Barça (al menos) una temporada más, a la espera de que el nuevo presidente le convenza para renovar hasta el final de su carrera con un proyecto ilusionante. Mientras esto no suceda, hay que seguir disfrutando del Messi futbolista y centrarnos en todo lo que puede ofrecer en el próximo curso. Como esos apasionantes cuatro récords que tiene al alcance de la mano (o, mejor dicho, de sus botas).

Messi ya es, entre otras muchas cosas, el máximo goleador de la historia del Barça (634 tantos) y de la Liga (444) y el futbolista con más Balones de Oro (6), más Pichichis (7) y más Botas de Oro (6). Pero quiere más. Esta temporada puede batir el registro de más goles en un mismo club (está a solo 9 de Pelé, que logró 643 con el Santos), puede convertirse en el futbolista que ha vestido más veces la camiseta blaugrana (ha jugado 731 partidos y está a solo 36 de los 767 de Xavi), puede superar (¡¡¡ojalá!!!) los títulos de Giggs en el Manchester United (tiene 34 en el Barça por 36 del galés en el club de toda su vida) y, por supuesto, igualará la marca de 17 temporadas seguidas jugando en el Barça que poseen Rexach y Xavi.

Todos estos récords no serían posibles si hubiese culminado su idea de abandonar el Barça. Porque el Barça ha sido, durante todos estos años, la mejor plataforma para que Messi explotara sus virtudes futbolísticas. Por eso hay que evitar que la amenaza de divorcio se cumpla. Messi debe acabar su carrera deportiva en el Camp Nou para batir todavía más registros estratosféricos. El próximo presidente del Barça ya sabe cuál será su primera misión: renovar a Messi...