Las renovaciones de la vergüenza

Las renovaciones que Bartomeu perpetró la noche del 20 de octubre del 2020, después de un partido de Champions, fueron sorprendentes. La ampliación de los contratos de Ter Stegen, Lenglet, Piqué y De Jong se efectuó, además, con premeditación y alevosía. Unas renovaciones que la actual junta que preside Laporta, después de analizarlo durante varios meses con un bufete de abogados, considera que pueden ser constitutivas de delito porque han supuesto un sobrecoste de 311 millones de euros. De hecho, el club está estudiando llevar el caso a la Fiscalía por presunta administración desleal. Una vez más, la gestión de la anterior directiva se encuentra bajo sospecha.

Bartomeu defiende su actuación, pero resulta vergonzoso comprobar cómo se malgastaba el dinero de la entidad blaugrana. Y tan indecente es la actitud irresponsable del anterior presidente como la complicidad de los jugadores afectados, que aceptaron estos nuevos contratos desorbitados sabiendo, como sabía todo el mundo, que eran absolutamente desproporcionados y estaban fuera de mercado. No sé si la justicia actuará ante semejante despropósito, pero la denuncia de la directiva de Laporta servirá para que todos los protagonistas se avergüencen de su actitud. O tal vez no. Porque hay quien ni siquiera se va a sonrojar ante semejante despilfarro. Al menos, la investigación del club va a servir para que Piqué acepte una nueva rebaja de salario que ayude a inscribir a los fichajes (Christensen, Koundé, Kessie, Raphinha y Lewandowski) y a los ‘renovados’ (Dembélé y Sergi Roberto). 

Desde LaLiga se asegura que el Barça necesitará una cuarta palanca (la venta de otro 24,5 por ciento se Barça Studios) y “algo más” para cumplir los requisitos del ‘fair play’. Y ese “algo más” significa reducir la masa salarial vendiendo jugadores y, sobre todo, rebajando fichas. No es un escenario fácil. Desde el club, sin embargo, quieren enviar un mensaje de tranquilidad. El mismo que verbaliza Laporta. El presidente esgrime que se han hecho operaciones por valor de 868 millones que euros que han servido para tener una entidad saneada.

Habrá que ver cómo el Barça es capaz de desencallar esta situación en los próximos cinco días. Aunque la fecha límite para la inscripción de futbolistas para las competiciones oficiales de la temporada 2022-23 es el 31 de agosto a las doce de la noche, antes se disputarán tres partidos de Liga (Rayo, Real Sociedad y Valladolid), en los que Xavi espera contar con esos siete futbolistas.