Rakitic, con un pie y medio fuera del Barça

Cada temporada el Barça genera inevitablemente un indeterminado número de futbolistas damnificados

Rakitic descarta Manchester

Rakitic descarta Manchester / EFE

Ernest Folch

Ernest Folch

Cada temporada el Barça genera inevitablemente un indeterminado número de futbolistas damnificados que juegan menos minutos de lo previsto o directamente no participan. Este año el damnificado estrella es sin duda Rakitic que, aunque sigue entrando a menudo desde el banquillo, ha perdido definitivamente el estatus de intocable. Lo más espectacular del croata es que ha pasado de ser titular en 9 de cada 10 partidos en las temporadas anteriores a serlo una sola vez en los ocho que ha disputado este año. En el último partido de Champions se limitó a jugar 6 minutos testimoniales, algo que ejemplifica cómo Valverde ha cambiado este año su orden de prioridades. Y es que el cambio que ha experimentado Rakitic se debe única y exclusivamente al cambio de opinión que sobre él ha tenido Valverde, que ha pasado de considerarlo uno de sus jugadores imprescindibles a relegarlo a una posición totalmente secundaria.

Ante esta situación, es normal que el futbolista esté molesto, algo que demuestra su carácter competitivo. Pero tampoco es justo convertirlo en una víctima y afirmar, como se ha llegado a decir, que se le está tratando de manera injusta. Porque Valverde tiene todo el derecho del mundo a cambiar de opinión y sentarlo en el banquillo, sobre todo si se demuestra que el equipo no baja sus prestaciones. El entrenador del Barça no ha maltrado a nadie, como se ha dicho, sino que cree legítimamente que en estos momentos el mediocampo más fiable es el que está formado por Busquets, Arthur y De Jong, con el apoyo de Arturo Vidal. 

Lo cierto es que Rakitic no ha querido o no ha podido marchar ni este verano cuando lo quería la Juve ni el anterior cuando lo quería el PSG, pero esta vez tiene ya muy pocos argumentos para quedarse. Vuelve a demostrarse que la mejor forma para acelerar una salida es que un futbolista deje de jugar. Quizás por ello es inevitable pensar que estamos ya, si no lo remedia una lesión o alguna circunstancia excepcional de última hora, ante el final de etapa de Rakitic en el Barça. Lo extraño sería que no se fuera este mismo enero.