El puzle de Guardiola

EL MADRID, EN CUARTOS

Valdebebas, un ajedrez europeo. Zidane con negras, Gasperini con blancas. El Madrid con marcador a favor, tres centrales y Vinicius por bandera. Objetivo: seguridad. La Atalanta con renta en contra, cuatro medios y un punta. Objetivo: ganar el mediocampo. Y el Madrid, en su constante bucle de supervivencia en su competición fetiche, activó su “modo competición”. Cuando vio las barbas de Barça y Sevilla pelar, puso las suyas a remojar y acabó pasando ronda, después de un recital de Modric, Benzema y Vinicius. Los de Zidane merecieron el pase: tuvieron oficio en la ida y más fútbol en la vuelta. Los italianos, un quiero y no puedo, acabaron entregados. El Madrid estará en el bombo de cuartos.

EL PUZLE DE GUARDIOLA

En Budapest, casa de alquiler inglesa por las restricciones por el Covid-19, los ‘Pep Shop Boys’ certificaron su pase a cuartos liquidando a los ‘potros’ del Borussia. De Bruyne firmó un golazo y Gundogan la sentencia. City, en cuartos. A nadie escapa que el club del petrodólar tiene doble objetivo esta temporada: volver a reinar en la Premier (algo que tiene en su mano) y coronarse rey de Europa (objetivo a cinco partidos vista). Y pinta bien, porque este curso todas las piezas encajan en el puzle de Guardiola. Este año el City es una roca atrás, un diamante en el mediocampo y una maza en ataque. Ganar una Champions es difícil y firmar un doblete, aún más complicado. Pero si hay un entrenador capaz de hacerlo, ese es Guardiola.

MACHADA EN LONDRES

Salió herido de Bucarest, pero no muerto. El Atleti intentará dar vuelta al destino en Stamford Bridge, ante un Chelsea plagado de estrellas, crecido y que con Tuchel, lleva 13 partidos consecutivos sin conocer la derrota. Simeone sacará la artillería pesada. De entrada, Joao Félix (que debe sumar voluntad a su talento), Marcos Llorente (fuente imparable de energía) y Luis Suárez (que busca cortar su sequía como forastero en Champions). El Chelsea es favorito, pero la última vez que el Atleti pisó Inglaterra, el Liverpool cayó a plomo. Y ‘Cholo’ puede quedar uno…