La primera victoria de Xavi con el Barça

Xavi ya es, oficialmente, el nuevo entrenador del Barça. Un gran fichaje que se cerró ayer, tras una jornada tan maratoniana como esperpéntica, con guerra de comunicados incluida, pero que finalizó felizmente con el anunció de la incorporación del nuevo técnico blaugrana. Xavi volvió a demostrar su tremenda pasión por volver al Camp Nou (y su condición de redomado culé) pagando de su propio bolsillo la mitad de la cláusula de rescisión (5 millones) para desvincularse del Al-Sadd. Han sido tres días de intensas negociaciones, con momentos de tensión entre los dos clubs, con dudas, una auténtica partida de ajedrez jugada estratégicamente por ambas partes, que ha acabado con la mejor noticia posible: el regreso de Xavi a su casa. Xavi viaja este mañana a Barcelona, será presentado el lunes y tomará las riendas del equipo para preparar el derbi contra el Espanyol del día 20. Dispondrá de casi dos semanas (aunque con pocos jugadores por culpa del parón de selecciones) para obrar el milagro de transformar el Barça.

Y es que, con el fichaje de Xavi, el Barça vuelve a ser el epicentro futbolístico mundial. Más allá de la ilusión que genere su llegada a todos los culés (en este caso, la unanimidad es absoluta), la incorporación del exjugador blaugrana al banquillo del Camp Nou despierta una enorme expectación en todo el planeta. Su imagen está ligada, indefectiblemente, al mejor Barça de la historia, aquel Barça que enamoró universalmente a todos los aficionados. Saber si Xavi será capaz de repetir las hazañas que él lideró desde el campo con Guardiola como entrenador es lo que provocará un nuevo interés mediático global. Xavi no dispondrá, desgraciadamente, de los mismos jugadores de los que dispuso Pep en su momento. Pero en esta plantilla (sobre todo entre los jugadores jóvenes) existe suficiente talento para construir un equipo triunfador. Y eso, precisamente, es lo que observará con detalle el mundo. Hasta dónde es capaz de llegar el nuevo Barça de Xavi. De ser un Barça triste, aburrido, decadente, que no interesaba a nadie, a un Barça que vuelve a ser objeto de interés. Esta ya es la primera victoria de Xavi. 

Porque el Barça vuelve a tener, también, un entrenador ganador. Ambicioso. Dispuesto a resucitar a un equipo moribundo. Para hacerlo, otra vez, campeón. Y que el nuevo círculo virtuoso de Laporta gire a la velocidad necesaria para que el club (también moribundo) despegue. Xavi es el técnico ideal para este reto mayúsculo.