El primer día que vi a Messi fue en un vídeo que me enviaron

Yo tenía contactos en muchos sitios del mundo: Uruguay, Rumanía, Bulgaria, Argentina, Brasil... No había la tecnología que hay ahora, que lo ves todo. En aquella época, si no ibas al sitio a ver el partido, no te enterabas de nada. Luego apareció el vídeo, una mejora. Uno de estos observadores, amigos, que había vivido en Barcelona tras salir por patas de Argentina en la época de Videla, Juan Mateo Walter, me llama un día y me dice: "He visto un chaval que es una cosa diferente".  

Entonces no tocábamos jugadores pequeños, no había ese trasiego que hay ahora y le respondí: "¿Qué quieres que hagamos con doce o trece años?". Pero me envió un vídeo, este en el que juega a fútbol sala y que ha salido ya varias veces, lo veo y me caliento. Me sorprendió su manera tan directa de ir hacia la portería y dije "vamos a hacer una prueba". Gaspart acababa de llegar a la presidencia y hablé con Parera y Lacueva, que me dijeron que el presupuesto para el fútbol base estaba cerrado y no podían gastar más. "No te preocupes, estará unos días aquí y lo veréis". En Argentina organizaron una expedición y vinieron sus padres, hermanos... Se instalaron en el Hotel Catalonia de la Plaza España. Pero los presupuestos del fútbol base son los que son y si el coste de un jugador se dispara lo trastoca todo. Tanto fue así que estuvo a punto de romperse porque el gasto mensual era muy elevado: un piso en la Gran Vía de Carlos III, los viajes, la estancia, el tratamiento de crecimiento... El Barça dudó y nadie cogía la responsabilidad. Ahora, con el paso de los años, puede sorprender, pero en aquel momento aquella situación era normal. No era una decisión fácil. Al final, entre uno y otro, Charly (Rexach) y Lacueva, e incidiendo mucho en los directivos, se firmó el contrato y todos los detalles.

El primer contrato lo firmó como apoderado Juan Mateo, que firmó en nombre del jugador, y también firma el jugador y los padres. A nivel personal lo único que quiero resaltar es la satisfacción como socio y seguidor del Barça de haber puesto mi granito de arena en traer a un chaval que, con los años, ha superado todas las expectativas y se ha convertido en lo que es. Nos ha hecho disfrutar durante muchos años y los que aún quedan. Y, además, es de los pocos futbolistas que el Barça no fue a buscarlo porque no lo conocía. Para mí es una satisfacción haber colaborado porque Messi ya existía, pero que haya venido aquí y lleve no sé cuántos años y sea la sensación del Barça y del mundo... 

Si un jugador me ha gustado, no podría llevarlo a ningún otro equipo.