Pressing Iniesta

Es imposible enfadarse con Andrés Iniesta tome la decisión que tome. Andrés es el Barça, es el adn del club y por eso tiene un contrato perpetuo. Aprovechando el parón liguero el jugador recibió la visita de Manu Carreño que se presentó con un fórceps y la intención de saber si se irá a China o no. Lo preguntó de todas las maneras posibles y con todas las trampas retóricas imaginables, pero lo máximo que obtuvo fue confirmar que el de Rusia será su último Mundial. Fue una conversación de tono amable, hecha desde de la complicidad y que se centró en la continuidad de Iniesta donde “se abren otras puertas que son muy ilusionantes” en palabras del manchego, a pesar de admitir porque no se va del todo “me hace dudar que estoy en el club de mi vida, el cariño de la gente”. No quiso ni confirmar la existencia de la oferta china, cosa que sí admitió implícitamente su padre tiempo atrás. Se lo podrían haber recordado. Al final, hubo un último intento de sonsacarle un titular mediante un nada sutil chantaje emocional consistente en una colección de testimonios de gente implorando que se quedara. Pero tampoco soltó prenda aunque para Ramon Besa, presente durante esta entrevista de El Larguero, “Iniesta es hombre de certezas, no acostumbra a dudar, si habla es que tiene una decisión tomada...”. Y seguramente dio en el clavo pero tendremos que esperar.