Un portero como una catedral

Ter Stegen fue decisivo para el Barça ante el Athletic

Ter Stegen fue decisivo para el Barça ante el Athletic / EFE

Rubén Uría

Rubén Uría

Canino de puntos, el Athletic quiso rugir: fútbol directo, empuje y bravura. A esa atmósfera intentó responder Messi, aún convaleciente y mermado, como el Cristo obrero de la canción: Arquitecto, ingeniero, artesano, carpintero albañil y armador. Él no bastó y el resto del equipo no acompañó. El Athletic tuvo hasta cinco claras: Williams por partida doble, Yuri, Muniain y Raúl García Todos se estrellaron con el mejor de la noche: Marc André Ter Stegen.  Un portero como una catedral.

RESPETA Y SERÁS RESPETADO

Orgulloso de la bandera del buen fútbol que se arroga, porque hay quien escribe que su fútbol es “patrimonio de la Unesco”, Setién estuvo ayer desafortunado. Es un magnífico entrenador, ha dotado al Betis de un estilo reconocible, ha apostado por la cantera y ha metido al Betis entre los mejores, pero eso no le concede carta blanca para impartir lecciones morales, ni para usar el estilo como un arma arrojadiza. Después de sufrir un meneo tremendo y encajar tres goles como tres goles, dijo que comprende que el Leganés está abajo, porque es un equipo que hace bien cuatro cosas. Etxeberria, en redes sociales, supo batir la justa: “Si para defender tu forma de jugar tienes que atacar otras, pierdes credibilidad. Respeta y serás respetado”. Amén. 

UNIÓN O DERRUMBE

Fuera de la Copa ante el Girona, superado por el Madrid en el derbi y en la tabla y con la Juve de CR7 a la vuelta de la esquina. Ese es el delicado escenario en el que tendrá que hacer equilibrios Simeone.  El Atleti invirtió mucho dinero este verano, blindó a Griezmann, se acercó a los 400 millones de presupuesto y confeccionó una plantilla para aspirar a todo. Alejado del partido a partido y entre VAR y VAR  (“Todo OK, José Luis”), el Atleti se ha metido en un buen jaleo. Y el Cholo  y sus chicos tienen dos caminos: derrumbarse como un castillo de naipes por no soportar la presión o hacer autocrítica, trabajar más, aislarse, volver a unirse y superar la adversidad.  Al final, Cholo puede quedar uno.