¿Por qué se fichó a Yerry Mina?

Yerry Mina se enfrenta a Samuel Umtiti este viernes

Yerry Mina se enfrenta a Samuel Umtiti este viernes / FCB

Ernest Folch

Ernest Folch

Por enésima vez en lo que va de año, Valverde dejó ayer fuera de la convocatoria a Yerry Mina. De hecho, es una decisión tan habitual que ya no es ni noticia. Pero debería serlo: Mina llegó a principios de enero por casi 12 millones de euros y una ficha cercana a los 4. Vino en principio como cuarto central, pero si fue cerrado en el mercado invernal era porque se le necesitaba al menos a corto plazo. Tres meses y medio después, su balance es paupérrimo: 187 minutos disputados, incluyendo la Supercopa de Catalunya, y solo una alineación en partido de Liga.

El resultado es que le conocemos más por sus bailes, afición a la música y su personalidad extrovertida y simpática que no por su juego, que no ha tenido ocasión de demostrar. Su caso ilustra muy bien cuál es la situación actual de la gestión deportiva en el Barça: la secretaría técnica apuesta por un jugador, pero el entrenador no cree en él, algo que lleva a pensar que nadie le preguntó a Valverde si lo quería antes de confirmar el fichaje. Al mismo tiempo, sus reiteradas ausencias no le impiden ocupar una plaza en el primer equipo, plaza que al estar ocupada no puede asignarse a un futbolista de la cantera para que tenga ficha del primer equipo. Y encima se gasta un dinero que solo tendrá retorno si se consigue vender al jugador, algo que ya sabemos que en el Barça es harto difícil. Es decir, descoordinación, gasto innecesario y bloqueo de la cantera resumidos en el nombre de Yerry Mina, que por supuesto no tiene ninguna culpa de ello, puesto que ni tan siquiera le han dejado demostrar su valía.

Se prometió que los fichajes venían a aumentar la competencia de la plantilla, pero hoy Yerry Mina no le amenaza la titularidad a nadie, ni siquiera amenaza el banquillo a un suplente como Vermaelen. El jugador colombiano es hoy un antiejemplo de lo que debe hacerse y la pregunta que plantea tiene más miga de lo que parece: ¿Por qué se fichó a Yerry Mina? La respuesta, hoy, es un misterio insondable.