¿Podrá Laporta cumplir su promesa?

Laporta asegura que Messi quiere quedarse y en el Barça quieren que se quede

Laporta asegura que Messi quiere quedarse y en el Barça quieren que se quede / FC Barcelona

Albert Masnou

Albert Masnou

El tiempo pasa inexorablemente sin que Leo Messi haya renovado su contrato con el Barça. Hace tres meses y medio que Laporta es presidente y un mes y medio que el jugador argentino abandonó la ciudad condal tras acabar la temporada. Desde entonces, al igual que en la campaña electoral, han llegado mensajes optimistas, de tranquilidad, de Joan Laporta sin que estos ‘inputs’ se vean aún refrendados por un acuerdo con Messi.

La buena relación que hay entre la actual junta y el entorno del jugador es real, aunque ciertas dudas empiezan a aflorar. Las obligaciones en la rebaja de la masa salarial, la imposibilidad de rescindir contratos a la brava, las dificultades que encuentra Mateu Alemany para las reducciones de los salarios de los jugadores y la negativa de Javier Tebas de amoldarse a las necesidades del club azulgrana han provocado que empiece a cundir la inquietud entre los gestores del club. Cada vez hay más quienes admiten en privado la imposibilidad prolongar a Messi si el club no logra el escenario necesario para encajar la ficha del argentino. PSG y City no han hecho movimiento alguno pero están con un ojo pendiente de lo que pase en Barcelona porque son conscientes de que bajar 200 euros la masa salarial no es un trabajo menor. Vender a Griezmann, por ejemplo, a un precio correcto, sin entrar en pérdidas, es una operación que lleva todo el verano (el Barça necesitó tres veranos) y debe contar con la ayuda del propio jugador. Vender a Griezmann en dos semanas sería un milagro. Y no solo está Griezmann por el camino, sino Pjanic, Umtiti, Coutinho, Dembéle, Aleñá, Braithwaite, Neto...

¿Esperará Messi tanto tiempo a que se clarifique la situación? ¿Aguantará Laporta la presión que irá en aumento? La pretemporada empieza el próximo lunes y Messi no debería incorporarse hasta tres semanas después, a inicios de agosto. ¿Qué pasará si llega este momento y Messi no ha renovado? La verdad es que no es un camino de rosas, aunque las dos partes mantienen el convencimiento de que todo acabará bien.