Pim, pam, Messi

Messi ya le ha marcado 30 goles al Atlético en 39 partidos

Messi ya le ha marcado 30 goles al Atlético en 39 partidos / AFP

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Número redondo. 50 goles en 2019, medio centenar de goles, que es lo mínimo que lleva marcando desde hace seis años. Estoy hablando, o escribiendo, de Messi, claro, aunque no hace falta la aclaración, todo el mundo mundial sabe que el único jugador del mundo que puede presentar estas cifras es Leo Messi. Por cierto, que puestos a establecer más y más récords, Leo también se ha permitido el lujo de llegar a los 250 goles en el Camp Nou. 250 en 234 partidos, algo más de un gol por partido.

A todo eso, es el único jugador en la historia en acreditar más de 40 goles en diez temporadas consecutivas. Naturalmente, nadie le hace sombra. Y lo más grande, pronto no se la hará ni el mismísimo Pelé, al que Messi ya tiene a tiro de 25 tantos en lo referente a goles marcados en competición oficial en un solo equipo. 618 contra 643, con el ‘pequeño’ detalle de que O’Rei los marcó en dieciocho años en el Santos y D1OS lleva quince años y dos meses en el primer equipo del Barça, siempre hablando de partidos oficiales. 

Goleadores ha habido muchos y muy buenos a lo largo de la historia del fútbol, pero lo de Messi es un caso único por su extraordinaria y decisiva influencia sobre un terreno de juego. Ya que ha surgido la comparación con Pelé, es más que posible que sea precisamente la referencia más próxima. Por calidad y, en el aspecto goleador, por unas condiciones físicas que le hacían letal en el área, potencia, salto, remate de cabeza...

Seguramente, las dotes goleadoras del brasileño  eran, en principio, mejores que las que tenía Leo y ahí está precisamente el gran mérito del crack barcelonista, que ha puesto el talento por encima de cualquier consideración física. Sin ser el más alto, el más fuerte ni el más resistente para fajarse con los defensas contrarios, es el mejor goleador. No le ha hecho falta pelearse con nadie, simplemente con su exquisita técnica y velocidad de ejecución es el que más goles marca.

Podríamos hablar de otro grande, de Alfredo Di Stéfano, de quien se dice que fue el primer futbolista total capaz de recorrer todo el campo, lo cual quiere decir que amén de su calidad técnica tenía unos pulmones privilegiados (otra vez el físico), pero Di Stéfano hace ya tiempo que quedó atrás: 308 goles en 11 temporadas en el Madrid, 480 en toda su carrera. Otros cracks del gol: Gerd Müller, el rey en el área pequeña, pero a la que le sacabas de allí ya no era determinante para su equipo. Romario, pura magia, pero tan irregular como genial, no supo tener continuidad en su carrera, algo en lo que Messi también es el número uno.

Cristiano Ronaldo, bueno, buenísimo, otro superdotado desde el punto de vista físico, pero si entramos en detalles, que por otra parte no es necesario porque todos los tenemos en mente, sale perdiendo. Así pues, ¿qué es lo que hace goleador a Messi? Pues su enorme talento, su rapidez mental, su precisión quirúrgica con la pierna izquierda.

Leo piensa y ejecuta, como mínimo, un segundo antes que cualquier otro futbolista en el mundo. No hace nada sin saber ya lo que va a hacer a continuación. El regate para disparar, el toque sutil para hacerse un espacio para el remate... Arma la pierna con una velocidad de vértigo. Es el rematador invisible, los rivales no le detectan. En el oeste sería el pistolero más rápido. Pim, pam, pum. Pim, pam, Messi. Pim, pam, gol. Una y otra vez. Y otra... Pim, pam, el mejor de la historia. Así de sencillo, así de único e irrepetible.